Sus estudios fueron interrumpidos por la Segunda Guerra Mundial, y posteriormente tuvo que trabajar… Así que este hombre, de 94 años, se graduó de la Universidad de Virginia Occidental (WVU), después de haber trabajado dentro y fuera de la milicia durante más de 75 años.
Anthony Brutto de Morgantown se inscribió en la WVU en 1939 y comenzó estudiar ingeniería, pero se dio cuenta que no era lo suyo, por lo tanto se cambió de carrera y optó por estudiar Educación Física y Artes Industriales.
Todo esto ocurrió antes de ser reclutado en la Segunda Guerra Mundial y servir en el Cuerpo Aéreo del Ejército, según un comunicado de prensa de la WVU.
Cuando era niño, tenía un hobby de hacer cosas de madera, como baratijas. Él había esperado transformar su pasatiempo en un negocio para crear cosas útiles, después de obtener un título formal de la WVU.
Brutto volvió a la escuela en 1946, pero se vio obligado a abandonar de nuevo, esta vez para cuidar de su esposa enferma. Pronto comenzó a trabajar como maquinista en varias fábricas.
Brutto se retiró en la década de 1980, dedicándose a esculpir en sus ratos libres. Pero no dejaba de pensar en la idea de regresar a la escuela, y su hija, Lisa Bridges, quien trabaja para la universidad como desarrolladora web, dijo haber descubierto que los estudiantes podían acreditar por su experiencia de vida.
“Pensé… sería muy grande en este momento de su vida para ser capaz de obtener su título”, dijo Bridges.
Aunque se inscribió por primera vez en la Universidad de West Virginia en 1939, ahora Brutto, después de más de 75 años, por fin pudo ponerse una bata para recibir su título de la WVU.
“Siempre fue importante para mí graduarme, creo que es genial”, dijo Brutto a ABC News hoy.
Su esposa, Donna Brutto, estuvo de acuerdo.
“Creo que es maravilloso que esté recibiendo esto después de todos estos años”, dijo. “El lo merece.”
April Kaull, subdirectora de Relaciones Universitarias / Noticias de WVU, dijo que la historia de Brutto “refleja la determinación y perseverancia de muchos estudiantes en el campus de WVU”.
“Él no dejó que nada en su vida o los desafíos que enfrentó lo mantengan alejado de su meta final”, dijo Kaull.
No cabe duda del gran ejemplo que nos pone Simon. Él es la clara evidencia de que nunca es tarde para lograr y cumplir aquellos sueños que siempre anhelamos.
Conoce a Simon Brutto en el siguiente video.