No es secreto que el mundo no tiene mucha fe en las generaciones venideras, pues entre los challenge de los millennials y la generación z que se indignan de todo, nuestra paciencia se acaba… sin embargo, hay casos que son pequeñas luces que nos regresan la confianza en un futuro mejor si queda en mano de personas como las que a continuación les describiremos.
Esta es la historia de Miguel, alias “El primo”, un chico que estudia en el bachilleres Plantel 6 en la Ciudad Juárez, México, que todos los días llegaba tarde a clases, pero no porque se quedara dormido, o porque fuera un flojo, sino porque además de estudiar, tenía que trabajar.
Después de su trabajo corría para ir a la escuela y cuando llegaba, tenía que pedir permiso a los maestros para entrar con la clase ya comenzada.
Sus compañeros se dieron cuenta de esta situación y de que su amigo no tenía ropa para el frío, así que entre todos se organizaron e hicieron una cooperación, en la cual también participaron los maestros, y con el dinero recaudado le dieron una grata sorpresa.
Cuando El Primo llegó a la clase (otra vez tarde) no se podía imaginar la sorpresa que sus compañeros le tenían planeada. Primero fue con la maestra para pedirle permiso de pasar, mientras le explicaba su situación, y al llegar a su banca encontró una enorme caja, dentro habían tres regalos: una chamarra, unos zapatos y dinero en efectivo.
Antes de abrir su regalo, uno de sus compañeros le dedicó las siguientes palabras:
Primo hacemos este gesto contigo porque sabemos que le echas ganas a la vida y estudias, trabajas y no cualquiera hace eso, la neta y entonces, esperemos no te ofendas con esto y creeme que es de todo corazón.
El primo emocionado abrió su regalo, entre los gritos y aplausos de sus compañeros, luego se probó la chamarra mientras seguía abriendo las otras sorpresas agradeció a sus compañeros.
Muchas gracias a todos, de verdad, es la primera vez que me hacen eso. Y… bueno, no me tiene que dar pena al contrario, me tiene que dar orgullo de mis compañeros. Muchas gracias.
El primo no pudo evitar soltar unas lágrimas, sin embargo, cuando abrió el sobre que tenía dinero, les dijo a sus compañeros que no podía aceptarlo, a lo que uno de los alumnos le contestó que ese dinero era suyo y que lo usara para invitar a su madre a comer.
Tras ver todo este acto de generosidad, la maestra quien se encontraba al frente del salón dió el siguiente mensaje:
Miguel, quiero decirle, verdad que todos sus compañeros, forman parte de este obsequio para usted por el cariño que le tienen, verdad. Realmente me da mucho gusto, es realmente muy grato observar ese tipo de acciones nobles hacia un compañero por el cariño y la estima que le tienen. Esperemos, deveras que lo tome de todo corazón.
A continuación está el video:
https://www.youtube.com/watch?v=nWSGqCgk1To
Este video se subió a redes sociales y en pocas horas la historia de Miguel dio la vuelta por todo el mundo, conmoviendo a todas las personas e inspirándolas a seguir el ejemplo de este grupo y actuar generosamente con las personas que lo necesitan.
Gestos así son los que regeneran nuestra fé en la humanidad, esperemos que existan más personas como este grupo.