Se dice que solamente conocemos una pequeña parte de todas las criaturas que habitan en los lagos, mares y océanos del mundo, y uno de estos animales acuáticos nunca antes visto está perturbando a todos con su rara apariencia.
Una turista en China estaba de paseo en el lago de la Villa Miao, en la ciudad de Kunming, y de pronto vio algo muy parecido al rostro de un humano moverse debajo del agua. Sacó su celular y grabó en video a este raro pez que parecía tener ojos, cejas, fosas nasales y boca muy parecidos a los de una persona.
Se cree que este aterrador pez es una cruza de dos tipos de carpas: la común y la carpa de cuero, y su apariencia es demasiado similar a la de un rostro humano. Cuando esta criatura se acercó a la orilla sacó un poco su ‘cara’ de la superficie, abrió la boca para comer algo y el parecido con una persona fue todavía mayor.
Aunque la turista publicó el video en Weibo, el Twitter de China, con el título “El pez se transformó en un hada”, los usuarios de esa red social están comentando que las hadas son seres delicados, de rostros bonitos, y que este raro espécimen no es nada agradable de ver y que provoca una incómoda sensación de sorpresa y repulsión.
En Corea del Sur también se han visto otros dos peces que tienen caras parecidas a personas como este, pero como ambos son hembras es muy dudoso que se vayan a multiplicar.
Si Yogi es un perro con cara de persona que es extraño pero tierno, este pez que parece una versión acuática de Lord Voldemort está causando pavor en las redes. Aquí les dejamos el video que lo muestra surgiendo de las profundidades del lago y asomando su ‘rostro’.
El animal no es otra cosa más que una carpa fantasma, o sea, una variedad doméstica de la carpa común, obra de un criador británico en los años 80 que cruzó una carpa espejo con una carpa Koi. Su cuerpo es oscuro con matices dorados a lo largo de toda la aleta dorsal y en la cabeza. Esas manchas doradas forman complejos patrones en su cabeza, y eso es justo lo que estamos viendo en este video.
Todo se trata de una ilusión óptica que nos hace detectar una cara donde no la hay, un fenómeno psicológico conocido como pareidolia, donde un estímulo vago y aleatorio es percibido erróneamente como una forma reconocible.