Bartek Ostalowski, de 29 años, perdió los brazos hace diez años en un accidente automovilístico, y aunque la mayoría de la gente habría dejado que eso los detuviera en la vida, el joven polaco nos da una lección, asegurándose de cumplir sus sueños, y más.
Después del accidente, a Bartek le habían amputado sus brazos, dejando sólo una parte de sus extremidades.
Después de recuperarse de la cirujía, Ostalowski se puso tras el volante y aprendió a manejar, sólo que esta vez, usando sus piernas.
Así es, en lugar de deprimirse por lo sucedido, se propuso metas, y las fue cumpliendo poco a poco. Una de ellas: aprender a manejar autos de carreras usando sus pies.
Después de años, Bartek finalmente se convirtió en la primera persona sin brazos en conseguir una licencia internacional para carreras.
Ya como corredor profesional, Bartek ha competido en el Campeonato Europeo de Rally Cross, y en la Copa de Polonia.
Habiendo superado todas sus expectativas en las carreras, incluso, superando a su clase en las rondas de la Copa de Polonia, decidió cambiar su carrera a otro equipo y entrar en el mundo del drifting.
El deporte, que requiere rápidos cambios de marcha y el uso repetido del freno de mano para deslizar el coche alrededor de una pista, presenta enormes desafíos para el Polaco, pero esta es sólo una meta más para demostrarse que puede hacer lo que se propone.
Bartek ya fundado su propio equipo, Bart Racing, para ayudarle a realizar las modificaciones necesarias a su Nissan Skyline y permitirle competir en el circuito de drifting.
Sus mejoras al coche incluyen un nuevo motor, una transmisión más fuerte y una caja de cambios independiente. Sin embargo, todavía utiliza un volante estándar, que controla con un solo pie.
Bartek entró, en el 2014, al Drift Open King de Europa y, tras un éxito considerable, tiene como objetivo mantener la competición en pie y cambiar el deporte para siempre.
Estas son historias que inspiran, bien por Bartek.