Lo más malo que hiciste en la escuela o tu peor travesura no le llegan ni a los talones a este chico, quien es algo así como la encarnación de Bart Simpson y Junior en la vida real.
En la mañana del sábado 10 de octubre el departamento de policía de Baton Rouge, la capital de Lousiana en Estados Unidos recibió el reporte de que un autobús escolar estaba deambulando por las calles a alta velocidad. Los oficiales lo encontraron, y se llevaron la sorpresa de que lo iba manejando un niño de 11 años.
Debido a la pandemia las escuelas están cerradas, pero aún así este chico anónimo de la primaria Progress Head Start encontró el autobús que tenía casualmente las llaves pegadas. Así que lo encendió e inició su paseo.
Cuando los policías le dijeron que se detuviera el chico aceleró, y empezó esta persecución que duró alrededor de 45 minutos por las calles de Baton Rouge. Trataban de que se detuviera diciéndole que era mejor que se entregara, pero el chico se burló de los policías y pisaba el metal a fondo. Algunas personas como Joy Gradney incluso llegaron a captar en video esta persecución.
A medida que se acercaba más y más y más, vi que había un niño allí y se estaba riendo. Reía tontamente en el camino a través de Florida cuando pasó junto a mí. Yo no podía creer que era un niño.
– Joey Gradney.
Después de 45 minutos, y muchas patrullas persiguiendo al autobús, esto terminó cuando el niño estrelló el vehículo escolar contra un árbol, no sin antes haber chocado con otros tres automóviles.
Al final este “Toreto” de 11 años fue arrestado, y por suerte nadie salió lastimado en su loca aventura. Ahora está fichado bajo los cargos de robo de un vehículo, fuga con agravantes, daños a la propiedad y asalto con agravantes.
Independientemente de que se trataba de un delito, y que pudo haber causado grandes e irreparables daños, tienen que admitir que al menos este niño demostró su habilidad frente al volante.