Cada vez son más los casos de personas que hacen algo por el medio ambiente. ¿Y como no iba a ser asi? si cada vez el mundo esta más contaminado por tanto deshecho, menos mal que hay organizaciones y empresas que están al pendiente sobre este tema.
Lo sorprendente es que un niño de tan corta edad esté haciendo esto de reciclar basura, además que gana dinero por hacerlo.
Un niño de 7 años llamado Ryan Hickman, residente de California, literalmente ha convertido basura en dinero, ya que sostiene un negocio propio a base de reciclar, además de crearse un futuro, pues guarda las ganancias para ir a la universidad.
El joven empresario se inspiró tras una visita que realizó con su padre a un centro de reciclaje local, cuando Ryan tenía sólo 3 años de edad.
Llegando a casa, el pequeño y su madre distribuyeron bolsas plásticas entre sus vecinos para que Ryan pudiera recoger y deshacerse de botellas y latas, dice en su sitio web. Amigos, miembros de la familia y sus compañeros de trabajo pronto se unieron y nació una empresa cuyo ceo es un pequeñísimo empresario.
“Le gusta clasificar casi cualquier cosa y le gustaba poner las botellas en la máquina. Probablemente recibió dos o tres dólares, y estaba muy entusiasmado por ello. Y por supuesto llegó a ordenar su cambio, por lo que significó más clasificación”.
Ryan dedica una parte de su tiempo a clasificar y limpiar las botellas y latas que recoge. Después de unas pocas semanas, lleva la recolección a la planta de reciclaje. Obviamente sus padres le ayudan para poder ir en el coche (a este ritmo Ryan comprará el suyo propio en algún tiempo).
Su familia cree que el pequeño ha reciclado alrededor de 200,000 latas y botellas, y también ha ahorrado aproximadamente 10,000 dólares para la universidad; aunque si fuera la decisión de Ryan, dice que usaría el dinero para comprar su propio camión de basura.
Por supuesto ser un empresario de 7 años de edad viene con algunos obstáculos: los padres, la abuela y la tía de Ryan le ayudan recoger sus materiales reciclables, y a menudo realizan múltiples viajes para recoger algunos cargamentos a la vez.
El patio trasero de la casa actúa como la bodega de clasificación de Ryan, donde tiene alrededor de ocho grandes contenedores de basura que ordena con botellas y latas, plásticos y vidrio, todos ellos tienen su lugar.
“A Ryan le apasiona el reciclaje y le gusta que los demás se apasionen junto con él. Pienso que nos lo ha contagiado a todos. Te encuentras pasando junto a un bote de basura y sintiendo la necesidad de revisarlo en vez de simplemente seguir de largo”.
Ryan además vende playeras en línea, cuestan 13 dólares y todas las ganancias son donadas al Centro para Mamíferos Marinos del Pacífico en Laguna Beach, California.
Tienes que ver la convicción con que Ryan hace su trabajo, a continuación en el siguiente video…