Hay quienes prefieren no ver llorar a un hombre, incluso es mal visto en una sociedad machista, que malinterpreta la masculinidad y considera que todo tipo de llanto es un llanto cobarde. El instructor de este niño le enseña lo contrario.
Llorar no es algo que hacen los débiles solamente. Durante una iniciación en la escuela Cave of Adullam Transformational Training Academy, el instructor le enseña a un niño el valor del dolor y la importancia de saber sobreponerse, así como de la fortaleza mental.
Todo comienza cuando a Bruce, el niño en el video, se le pide que atraviese una tabla con su puño izquierdo como parte de su rito de iniciación. En una primera instancia, lo hace con la derecha, fácilmente:
Pero las cosas se ponen más difíciles cuando se le pide que lo haga con la izquierda y no puede.
Así que empieza a llorar:
“¿Porqué lloras? Está bien llorar, lloramos como hombres”, le dice el instructor, arrodillándose frente a él. “¿Porqué lloras?” le vuelve a preguntar. “Porque es difícil golpear con mi mano izquierda”, dice el niño. A lo que el profesor le contesta:
“¿Sabes que en la vida va a haber cosas más difíciles para ti de hacer, más que otras cosas? Y sabes que esas cosas que pueden parecer difíciles de hacer, las tienes que hacer como un hombre? Y te va a costar algunas lágrimas… Y tu sudor para pasar por ellas”.
“De eso se trata, hijo. Está bien llorar, yo también lloro. Así que veo que estás sosteniendo el golpe, no sé si estás teniendo miedo o sientes que no puedes hacerlo. Todos tenemos miedo a veces y cuando sientes resistencia (la tabla por ejemplo) quieres parar. Porque duele.
“Pero tenemos que pasar a través, como hombres. Y va a ser muy doloroso. ¿Entiendes? Para ser un hombre negro en este país, vas a necesitar fortaleza mental. Tienes que ser más fuerte en la cabeza que en el cuerpo”.
Al terminar de decir esto, el instructor le repite que está bien llorar porque puede pasar por sus emociones y cuando vuelva a aparecer esa emoción, la pueda y sepa controlar. “Tú puedes hacerlo”, le dice. Bruce entonces lo logra al primer intento.
“Felicitaciones”, le dice el profesor. “Siempre que te pase eso busca más profundo, y si no puedes con ello sigue luchando, sigue intentando”. En Youtube, la academia explicó al pie del video:
“Felicidades a Bruce, nuestro último recluta en pasar su test de iniciación… Decidimos compartir esta prueba para incitar a no sólo permitir a sus hijos llorar cuando enfrentan estrés emocional, sino que más importante aún, caminar pacientemente a través de este.
“En estos tiempos perversos, es vital que nosotros, hombres y padres de esta generación, no permitamos a nuestros hijos crecer con un falso sentido de masculinidad como la mayoría crecimos. Como resultado, tenemos una masa enorme de hombres emocionalmente inestables con odio, confusión y depresión en lugar de poder, amor y disciplina. Ponemos mucho énfasis en permitir a nuestros reclutas expresar abiertamente sus emociones…”