Las noticias médicas muchas veces son de lo más confusas. A veces te dicen que es bueno comer ciertas cosas y a los meses dicen que todo lo que habían dicho estaba terriblemente equivocado. Pero este caso es demasiado: un hombre que se dedicó a comer hamburguesas de McDonald’s por una semana, perdió peso.
Todo el mundo pensaría que comer solo hamburguesas del payaso Ronald te hace engordar pero, según un youtuber, sucedió exactamente lo opuesto.
Mike Jeavons es el “youyuber de Indias” que comprobó en carne propia que sus hamburguesas favoritas adelgazan. Tuvo la idea cuando vio el documental Super Size Me, donde el protagonista se alimenta solo de lo que venden en McDonald’s por una semana y termina seriamente descompensado, obeso y desnutrido. Mike quiso probar y repitió el experimento.
El sujeto de 33 años de edad intentó mantener una dieta balanceada, según los requerimientos diarios de calorías, grasa y sal, comiendo solamente en McDonald’s.
“Pensé que el documental era un poco sensacionalista. Si comes 5,000 calorías al día, claro que vas a subir de peso y con tu salud en riesgo.
“Pero intenté apegarme a las recomendaciones de cantidades y porciones diarias, calorías, grasa y sales para ver si podía lograr una dieta balanceada comiendo solo en McDonald’s y terminar a fin de cuentas contento”.
En un principio la esposa de Mike, Grace, se unió al reto pero luego de unos días decidió renunciar al hartarse de la comida rápida. Pero Mike, que es un guerrero, perseveró.
Dijo que el desayuno era muy fácil, se trataba de variar entre bagels, avena y panqués. Luego elegía una comida ligera para media mañana y entonces venía lo complicado.
“Sabía que tenía que comer una hamburguesa grande en la cena, así que debía comer algo muy ligero como una ensalada”, explicó. “Pero luego sentía un gran bajón de energía”.
“Entonces llegaba la cena y me sentía eufórico al terminar. Era como una droga. Tuve una extraña relación con la comida esa semana. Era una rara mezcla de no querer más de lo mismo, pero a la vez una gran necesidad de comerme una hamburguesa”.
Para el tercer día, relata, empezó a tener problemas estomacales, que él cree que se deben a toda la grasa que estaba comiendo, además de las bebidas azucaradas con las que se pasaba la comida.
“Para mantener todo en orden con las necesidades diarias, tuve que ahorrar la mayor cantidad de calorías posibles. Como comía muchas bebidas con endulzantes light me empecé a sentir débil”.
“A final de cuentas me sentía lento y un poco mal”, señala. Para cuando terminó la semana, rogaba por una comida casera. Pero se aseguró de concluir el reto con una hamburguesa con queso grande en la comida más importante.
Cuando terminó la semana había perdido la increíble cantidad de 2.2 kilogramos. Antes pesaba 99 k y terminó pesando 96. Todo lo documentó en su canal de YouTube: