Hace poco les mostramos unas impresionantes imágenes de uno de los lugares más fríos del planeta: Oymyakon, en Rusia, un pueblo que en invierno suele estar a más de 60 grados bajo cero y las nevadas pueden durar más de una semana. No podemos ni imaginar lo que es vivir ahí.
Sin embargo, los residentes están más que acostumbrados a seguir con sus actividades normales bajo estas frías condiciones; la gente sale a trabajar, algunas tiendas abren (si es que la nieve se los permite) y los niños siguen yendo a la escuela.
Su temperatura media en invierno es de -50°C, que si lo comparamos con la temperatura más baja que han reportado en la historia, -71°C, en realidad están calientitos, es por eso que el frío no es impedimento para que los estudiantes acudan a clases con normalidad.
Además, en Oymyakon solo hay una escuela y el centro decidió que solo cerraría sus puertas para primaria si las temperaturas caen por debajo de -52°. No solo eso, la institución decretó que los niños mayores de 11 años podrían quedarse en casa solo si la temperatura desciende por debajo de los -56°, así que no tienen excusa.
Los niños de la localidad llegan a la escuela caminando, usualmente acompañados de sus padres y con perros. Los alumnos de otros pueblos tienen que tomar un autobús y hacer un viaje que dura de 10 a 18 minutos, dependiendo las condiciones de la carretera.
A continuación les mostraremos un video filmado por el fotógrafo local Semyon Sivtsev, que muestra a los pequeños, abrigados de pies a cabeza, esperando el autobús y llegando a la escuela. Las imágenes son en verdad impactantes, sobre todo para personas que no vivimos en lugares tan helados como este.
En una entrevista con el periódico Siberian Times, Sivtsev explicó que el video fue filmado alrededor de las 9:00 a. m. del 8 de diciembre de 2020. En ese momento la temperatura era de -51°C y el fotógrafo tuvo que arreglárselas para capturar estas imágenes.
“¿Qué tan frío se sintió? Tuve que mantener mis guantes puestos, lo cual no era muy cómodo, pero de lo contrario mis dedos se habrían congelado y solo podría filmar en ráfagas muy cortas”, dijo al periódico.
Además, a pesar de que eran las 9:00 a.m., el cielo luce como si fuera de madrugada. Esto se debe a que el sol sale alrededor de las 10:00 a. m., por lo que a la hora que los niños salen a la escuela aún se ve oscuro y la temperatura es muy baja.
Por lo general, los niños permanecen en la escuela hasta las 5:00 p. m., aproximadamente tres horas después de que se pone el sol, así que también deben regresar a casa en temperaturas extremadamente bajas.
Si eres de los que se quejan del frío constantemente, agradece que no naciste en Oymyakon, donde un niño de 11 años es mucho más alfa que algunos quejumbrosos que conozco.