Si todavía crees que lo que viste en la película ¿Qué pasó ayer? solo es mera ficción, estás equivocado. Si no te ha pasado, esta historia es la prueba de que puedes llegar a un grado tal de ebriedad que no podrás recordar algunas cosas que hiciste durante la fiesta, solo esperemos que sean cosas divertidas y que no causen daño a los demás para que no tengas que arrepentirte después, aunque lo ideal es que controles tu forma de beber alcohol.
Yutthaphum Kaewekhem (sí, así se escribe su nombre), a quien mejor llamaremos Boom, como es conocido en Bangkok, Tailandia despertó luego de una noche de muchos tragos y lo primero que vio fue un perrito acostado junto a él en la cama, pero no tenía ni idea de cómo es que ese animalito fue a parar a su casa. Luego de indagar con los amigos se dio cuenta de que se trataba de una perrita que encontró en la calle y decidió adoptar.
Por supuesto empezó a revisar y a publicar en redes sociales para comprobar que no le pertenecía a alguien más, y una vez que estuvo seguro de que se la podía quedar la bautizó como Moota, le compró su collar, comida y todo lo necesario para que sea su compañera en la casa, por lo que podemos decir que esta extraña historia tuvo un final feliz.
Afortunadamente uno de los amigos que lo acompañaba en la fiesta y que no estaba tan ebrio, grabó el momento en que se encontró con Moota y decidió subirla al coche para llevarla a lo que será su nuevo hogar, así ya no hay duda de que no se trata de una broma, y n le quedó más que hacerse responsable de sus acciones, aunque no será ningún sacrificio porque tal parece que el amor entre él y la perrita surgió de forma instantánea.
Luego de un buen baño y de hacer los ajustes necesarios para que su estancia sea cómoda en la casa, este par se ha dedicado a divertirse y tomarse fotos que comparten en redes sociales, donde se han vuelto muy populares por la historia y porque se ve que ambos se sienten cómodos con el otro.