Una cosa es que un varón se equivoque en su pedido en línea o haya tecleado mal el nombre del producto que quería; pero cuando eso mismo le pasa a cientos de personas definitivamente algo anda mal.
Esta semana inicio la preventa de las nuevas consolas de Microsoft, la Xbox Series X y la Series S, y los gamers de todo el mundo estaban más que emocionados por estrenarlas, y muchos se apresuraron para ser de los primeros en comprarlas. Pero las prisas causaron no una sino cientos de decepciones.
Según lo que menciona Andrew Alerts, un vendedor asociado de la tienda en línea de Amazon, hubo un incremento del 747 por ciento en las ventas de la consola Xbox One X, y obviamente la pregunta fue ¿qué sucedió?
¿Acaso de pronto cientos de personas sintieron la necesidad de comprar la tercera consola de Microsoft, lanzada en el 2013, aunque ya hubiera otras más avanzadas y recientes? ¿o fue más bien que todos esos compradores se confundieron y en lugar de comprar la Series X pidieron la One X?
Seguramente sí hubo quienes pidieron la Xbox One X, pero estamos seguros que la gran mayoría de las personas se equivocaron, compraron una consola que salió ya hace siete años, y solo podemos imaginar la frustración, la decepción, el desencanto total de quienes las recibieron en lugar de la Series X.
Quizá Microsoft debería ponerles nombres muy diferentes a sus consolas, o tal vez los consumidores deberíamos ser más cuidadosos al momento de dejarnos llevar por el impulso de comprar y comprar.
Existen muchos fraudes en las compras por internet, pero esta vez no hubo más culpables que la prisa y el descuido por querer ser de los primeros en estrenar la Xbox Series X. Aquí no hubo estafa sino simple torpeza.