Los alunizajes de la década de los 1960 marcaron un antes y un después en la historia, pero además plantearon nuevos retos para la investigación espacial y uno de ellos se mantiene hasta nuestros días.
Faltan menos de cuatro años para que el lanzamiento de los cohetes del programa espacial Artemis, pero los científicos de la Agencia Nacional de la Aeronáutica y del Espacio de los Estados Unidos (NASA) todavía no han resuelto el problema del polvo lunar, y consideran que la próxima llegada de la primera mujer a la Luna necesita solucionar ese importante detalle.
El polvo lunar es una dificultad en varios sentidos porque oscurece los lentes de las cámaras, distorsiona las lecturas de instrumentos espaciales y afecta el rendimiento tecnológico. Además podría adherirse y carcomer los trajes espaciales, alterando su funcionamiento.
El proyecto Artemis hará sus lanzamientos en el 2024, pero antes es necesario descifrar este rompecabezas del polvo lunar. Por eso la NASA lanzó una convocatoria para que equipos de estudiantes de pre y posgrado envíen sus propuestas de solución.
El Programa “Big Idea” incluye diferentes categorías para este problema: prevención y mitigación del polvo de aterrizaje, tolerancia y mitigación del polvo del traje espacial; prevención, tolerancia y mitigación del polvo exterior; y tolerancia y mitigación del polvo de la cabina.
La NASA recibirá las propuestas desde el 25 de septiembre hasta el 31 de diciembre de este 2020, y los jueces van a seleccionar entre cinco y diez equipos ganadores. Obviamente, tendrán que ceder los derechos de sus pruebas a la NASA, pero los premiarán con 180,000 dólares.
Según Niki Werkheiser, ejecutiva del programa Game Changing Development de la NASA dentro de la Dirección de Misión de Tecnología Espacial (STMD: “Es clave demostrar la disponibilidad para proporcionar soluciones técnicas significativas para apoyar las misiones lunares a corto plazo, porque la NASA puede estar interesada en incluir todo o parte de conceptos viables en una futura misión espacial”.
Artemis será una exploración más amplia de la Luna, especialmente de su Polo Sur, y por eso quieren asegurarse de que todo funcionará a la perfección. Resolver el problema del polvo lunar será un pequeño paso pero también ayudará a este nuevo gran salto de la humanidad.