Los límites de la aplicación de las Inteligencias Artificiales (IA) aún están por descubrirse, pues cada vez se le encuentran usos más increíbles y novedosos, como lo que una joven acaba de hacer con su propia imagen, ya que dice querer ayudar a curar la soledad de los hombres, pero lejos de ser altruista, cobra por hacerlo.
La influencer y personalidad de Snapchat con cerca de dos millones de seguidores, Caryn Marjorie, de 23 años, ha utilizado tecnología de IA para crear un “clon de sí misma”, o sea, un deepfake bautizado CarynAI, el que ofrece como novia virtual para hablar y disfrutar de su compañía por un módico precio de un dólar el minuto. La nueva era de las infames hotlines está aquí.
La cura a la soledad es simple: dale tu número de tarjeta y conversa con tu novia CarynAI
CarynAI es el primer paso en la dirección correcta para curar la soledad. A los hombres se les dice que supriman sus emociones, que escondan su masculinidad y que no hablen sobre sus problemas. Juro solucionar todo eso utilizando CarynAI.
-Caryn Marjorie
Según la influencer, en la creación de CarynAI se ha empleado durante más de dos mil horas a un equipo que diseñó y codificó al chatbot que crearía una experiencia inmersiva y catártica, involucrando a las más grandes eminencias de la psicología a nivel mundial para integrar tanto terapia de conducta cognitiva (CBT) como terapia de conducta dialéctica (DBT) en sus tratamientos.
La compañía Forever Voices, que se especializa en la creación de deepfakes para que los usuarios tengan conversaciones con celebridades, fue la que se encargó de desarrollar el chatbot de Marjorie, analizando material audiovisual suyo y entramándolo con software del ChatGPT4 de OpenAI, consiguiendo que “El clon IA” de la influencer replique sus gestos, comportamiento y pesonalidad, dándoles a sus 1.86 millones de suscriptores una oportunidad de intimar con ella.
Aunque la intención en papel es ayudar con un tratamiento posibilitado por la tecnología de punta a quienes se encuentran solos y deprimidos, al final del día, algunas realidades del servicio quedan al descubierto, como que básicamente es igual a una hotline de antaño, que cobraba por minuto la compañía pero eliminando el factor humano del otro lado y suplantándolo por un chatbot que imita a la influencer.
Un gran éxito conlleva un gran escándalo
Sobra decir que el empleo de este chatbot con la estampa de Marjorie ha desatado controversia desde su rápida e imparable popularización, que le ha valido muchas ganancias, pero también la ha sujetado a agrias críticas e incluso a algunas amenazas de muerte, convenciéndonos de que es posible que aún no estemos preparados para el potencial de las IA que ya está impactando nuestras vidas.
Entre las críticas se presenta el evidente interés económico de la influencer, que cobra a un dólar el minuto, pues le dicen que si realmente le importara, lo ofrecería gratis y no explotaría a gente deprimida y solitaria. Sin embargo, también hay voces que hablan sobre cómo en realidad no se trata de una mala idea, solo de una mala y aprovechada ejecución.
Aunque se le ve promesa y creatividad al proyecto de la influencer, en general, la gente ha tachado el esfuerzo de Caryn como un descarado money grab que simplemente busca hacer varo a costa de gente enferma. Aun así, la premisa es una propuesta válida y con el adecuado manejo y distribución, la gente podría hacer más de lo que el Carynbot ha conseguido con su modelo de pago voraz.