El cuadro de esta motocicleta, llamada Light Rider, fue realizado por APWorks, una empresa de Airbus, que quiere demostrar hasta dónde se puede llegar con la impresión en 3D. Se han empleado materiales metálicos, sobre todo aluminio, nada de plástico, y lograron que fuera de un peso de solo 34 kilogramos.
Si bien es cierto, 34 kilogramos no es el peso de una pluma, para una motocicleta sí es algo realmente ligero, es más, ese peso correspondería más a una bicicleta; sin embargo, esta mezcla de aluminio y magnesio ha permitido que esta intrincada red que forma el cuadro, sea de un peso pequeño.
Un 30% menos que el que habitualmente tienen las motocicletas eléctricas de este tipo, y además, sus creadores aseguran que pueden generar una resistencia similar al del titanio, a partir del polvo que crean con los metales base, los que luego se imprimen con la tecnología láser.
Gran parte del mérito por la reducción del peso la tiene el software de APWorks, que consiste en determinar esos agujeros en el cuadro, y dejar la estructura con el peso justo para soportar el mayor peso con el mínimo material.
Light Rider utiliza energía eléctrica para propulsarse y sus creadores aseguran que el motor de 6 kW puede recorrer hasta 60 kilómetros por carga. Puede alcanzar una velocidad máxima de 80 kilómetros por hora. ¿Nada mal, no?
Actualmente ya están a la venta, pero si realmente quieres una, no esperes, ya que Airbus ha lanzado una edición muy limitada de 50 unidades, a un precio de poco más de 56 mil dólares cada una.