No por nada es tan famosa la proverbial mala letra de los doctores, quienes tienen el dudoso honor de tener la caligrafía más única de entre todos los profesionistas. Con sus jeroglíficos apresuradamente garabateados en papel, las recetas han requerido farmacéuticos expertos capaces de interpretar con más o menos éxito sus contenidos, para desmayo y desesperación de los pacientes que ya la temían pero no la debían… aunque es posible que Google esté a punto de remediar ese mal.
El coloso digital está enfocando sus esfuerzos en desarrollar métodos para interpretar confiable y consistentemente los textos ilegibles de los médicos, lo que significaría una considerable mejora en la calidad de vida de pacientes y trabajadores de las farmacias. El anuncio del proyecto ocurrió durante su conferencia anual en India el 19 de diciembre e involucra a integrantes de la industria farmacéutica.
Google apoya a la salud, “una receta a la vez”
La característica del conjunto de herramientas Google Lens que descifrará la pésima letra de médicos en todo el mundo aún no está disponible para ser accedido por el público, pero su modo de empleo está planeado para permitir que el usuario tome una fotografía de la receta médica o que acceda a ella desde su galería de fotos y que la aplicación detecte los medicamentos mencionados en la prescripción y los liste claramente. Según representantes de la compañía:
Esto actuará como tecnología de asistencia para digitalizar documentos médicos manuscritos, mejorando las capacidades de los humanos involucrados en la industria facilitando su trabajo y mejorando sus resultados.
Google Lens ya es capaz de evaluar, copiar y pegar letra manuscrita en formato de texto digital para ahorrarle a los usuarios el proceso de trascripción e incluso es posible para la aplicación enriquecer el texto analizado con información contextual, a la que se accede por medio de las capacidades de búsqueda del motor Google. Sin embargo, en gran medida, el sistema está limitado por la legibilidad del texto, que a partir de cierto umbral, resulta estar más allá de las capacidades actuales de la herramienta.
La nueva aplicación de una valiosa tecnología
Aunque, técnicamente, Google Lens ya debería ser capaz de interpretar los garabatos de los médicos al igual que es capaz de interpretar el manuscrito de cualquier otra persona, se ha comprobado que la letra del médico sí es objetivamente de peor calidad que el manuscrito promedio, probablemente debido a largas horas de trabajo y realizar receta tras receta, por lo que, con el cansancio cotidiano de sus manos, viene una escritura aún peor que la media y con ella también tenemos necesidades especiales para leerla, incluso por parte de una poderosa herramienta informática.
En esencia, la nueva aplicación que se encargará de leer las recetas médicas empleará Inteligencia Artificial (IA) para implementar un modelo de aprendizaje máquina que pueda decodificar los textos de la receta, así como identificar los productos farmacéuticos mencionados, permitiendo acceder a información pertinente sobre los medicamentos, los cuales quedarán remarcados en la versión digital de la nota médica.
Planes a futuro para su AI
No es casualidad que el proyecto haya sido anunciado y confirmado durante el evento anual que Google lleva a cabo en la India, pues el mercado indio para Google ha crecido más allá de los 500 millones de usuarios activos, lo que representa un mercado asiático importantísimo para la compañía. El hecho de que en la India, como en otros lugares del mundo, las recetas manuscritas sigan siendo comunes es, en gran parte, la razón de que se le haya dado tal importancia a este proyecto. Además, el problema a resolver en el caso indio es particularmente complejo por su riqueza cultural reflejada en las variaciones por regiones de su lengua.
Así, el proyecto de reconocimiento de manuscritos médicos va de la mano con otros desarrollos de IA que están encaminados a desarrollar un modelo capaz de entender casi por completo los mil idiomas más populares en el mundo, incluyendo múltiples dialectos, que en el caso de la India es un reto mayor, pues, regionalmente, las variaciones del idioma pueden ser enormes. Por ello la participación de un equipo nacional que pueda ayudar a los indios a disfrutar de los beneficios de la red en su propio idioma es un guiño de confianza y agradecimiento al gran mercado que la India representa para Google.