La tecnología crece a pasos agigantados y los gadgets de hoy en día son innovadores y, como el nombre de muchos de ellos lo indica, inteligentes. Esto quiere decir que son intuitivos y sencillos de usar, por lo que los mitos tecnológicos con los que hemos crecido ya son completamente obsoletos.
El día de hoy venimos a darles unos ejemplos de cómo seguimos usando los nuevos gadgets como si fueran los que tuvimos en el año 2000 y derribaremos algunos mitos que seguimos aplicando en ellos como si no fueran los artefactos más avanzados.
1. Dejar tu celular cargando daña la batería
Las baterías de los smartphones tienen un ciclo de vida preestablecido, así que no importa cuánto tiempo lo dejes cargando, este llegará a 100 por ciento y no absorberá más energía de la que necesita. Eso sí, dejarlo por mucho tiempo podría calentarlo, ya que las pilas están hechas a base de litio, y ese calentamiento sí arruina la batería. Pero si lo pusiste a cargar en la noche y olvidaste descargarlo hasta la mañana siguiente, no te preocupes, mientras no sea algo común todo está bien.
2. Entre más megapixeles tenga la cámara, mejor tomará las fotos
No son los megapixeles los que hacen que las fotos sean buenas, sino los sensores de la cámara que añaden calidad. Estos sensores convierten la luz en señales eléctricas que agregan color a la imagen. En sí, es la composición de la lente lo que te debe interesar a la hora de elegir un celular con “buena cámara”. Si los celulares prometen muchos pixeles, tus fotos tendrán muchos pixeles de mala calidad.
3. Usar tu teléfono en una gasolinera podría causar un incendio
La realidad es que no existe ningún caso documentado que pruebe que esto es realidad, porque para que la gasolina se prenda se necesita un alto voltaje. Las verdaderas culpables en este caso son las ondas electromagnéticas que viajan desde los celulares a las torres de control, cuya energía oscila entre 1.24 megaelectrovoltios y 12.4 peta electrovoltios. Estas son las ondas que podrían causar un accidente de estas magnitudes, pero es muy raro que suceda.
4. Borrar archivos de la papelera hace que se eliminen para siempre
Creemos que con vaciar la papelera basta para borrar los archivos definitivamente de nuestras computadoras, pero, en realidad, solo significa que han sido removidas de la lista de archivos que están en el sistema. Aun así, podrías recuperar archivos borrados con un software de recuperación. Si lo que en realidad quieres es borrarlos definitivamente, entonces deberás sobrescribir el espacio libre después de su desasignación.
5. Los escáner de rayos X en los aeropuertos son dañinos para el cuerpo
En realidad estos aparatos solo usan una pequeña dosis de rayos X, la necesaria para que los detectores funcionen. Estos solo serían dañinos si tu cuerpo estuviera expuesto a un gran nivel de radiación, pero lo poco que pega en tu cuerpo rebota en tu piel en vez de entrar a tu sistema. Se considera que la exposición media a la radiación es de 0,15 uSv (una unidad de radiación), que es más baja que la de los escáneres utilizados para fines oficiales.
6. Reducir la resolución de una imagen reduce el tamaño de archivo
Pues no, el tamaño de un archivo de imagen depende de la dimensión en pixeles. Si la resolución se reduce, no cambia su tamaño ni la cantidad de pixeles, o sea, el tamaño del archivo sigue siendo el mismo. Esto solo se puede lograr reduciendo su dimensión, es decir, los pixeles por pulgada de una imagen o PPI. Si quieres realizar esta movida, tendrás que usar aplicaciones como Photoshop, donde pondrás cambiar las dimensión de los pixeles, pero también se verá comprometida la resolución.
7. Más RAM significa una computadora más rápida
Ese no es el propósito de la RAM, lo que hace esta memoria es que ejecute mejor las multitareas. Contrario a lo que muchos creen, ponerle más memoria RAM a la computadora no acelerará su funcionamiento ni ayudará a que corran mejor los videojuegos. Esta ayuda a que los softwares y aplicaciones ejecuten adecuadamente. Si solo quieres la máquina para hacer trabajos de la escuela, 2GB de memoria son perfectos para ti.
8. Cerrar las aplicaciones de tu teléfono te harán ahorrar batería y funcionará más rápido
No, cerrar las aplicaciones en ejecución no significa que ahorrarás batería. Además, si una aplicación se está ejecutando en segundo plano tampoco afectará su rendimiento. Lo que sucede es que cada que la aplicación abre y carga de nuevo, esta consume recursos, o sea, si cierras aplicaciones con regularidad con la esperanza de consumir menos energía, estás haciendo lo contrario. Lo mejor es dejarlas en pausa y restringir tu uso de datos para reducir las notificaciones.