Científicos de la Universidad Central de Florida (UFC) han creado una super batería que trabaja como nueva luego de haber sido recargada más de 30 mil veces. Además, podría durar 20 veces más que las baterías convencionales de litio, y se recargará en segundos.
“Podrías recargar tu teléfono en segundos y no necesitarías cargarlo de nuevo en toda una semana”, indica la asociada posdoctoral, Nitin Choudhary.
Los supercapacitores pueden cargarse rápidamente porque almacenan electricidad -estáticamente- en la superficie del material, en lugar de usar reacciones químicas como las baterías. Esto requiere sábanas de materiales bidimensionales con áreas grandes que puedan almacenar muchos electrones.
La investigación, incluída la de UCLA y Henrik Fisker, el fabricante de EV, usa grafeno como el material bidimensional. Yeonwoong “Eric” Jung, de UFC dice que el reto es integrar el grafeno con otro material usado como supercapacitor.
“Nosotros desarrollamos una síntesis química simple, de manera que podemos integrar muy bien los materiales existentes con los materiales bidimensionales”.
Su equipo envolvió metales de unos pocos átomos de grueso, en nanocables altamente conductivos, dejando pasar fácilmente a los electrones, del núcleo al exterior. Eso produce un material que se carga rápido con energía y densidad de potencia que es relativamente fácil de producir.
La investigación está en sus inicios y no está lista para la comercialización, pero parece prometedora:
“Para aparatos pequeños, nuestros materiales son superiores a los convencionales en términos de densidad de energía, densidad de potencia y estabilidad cíclica”.
Jung llama a la investigación, “prueba de concepto”, y el equipo está tratando de patentar este nuevo proceso. Aunque podría no tener un futuro cierto, como otros desarrollos de baterías, muchos están interesados en su investigación.
Si se comercializa, podría llegar a instalarse en dispositivos que se recargarían en tan sólo unos minutos, en lugar de tardar horas. Tendríamos teléfonos cuyas cargas durarían mucho más que los actuales, que no explotarían, y soluciones de almacenamiento de energía en las casas que reducirían el uso de combustibles fósiles.