La historia de la aviación ofrece un manojo de ideas fascinantes sobre cómo crear naves aerotransportadas pero, en última instancia, sería el diseño de los hermanos Wright el que pasaría a inspirar el de la mayoría de las máquinas de vuelo subsecuentes. Pero esto no significa que un avión con dos alas convencionales sea la única manera de poner a volar un avión; hay muchas maneras de hacer que eso suceda, y el youtuber PeterSripol nos demuestra que uno de esos métodos implica un par de cubetas de pollo frito de KFC.
El video que estamos a punto de mostrarles documenta el proceso, de principio a fin, para la creación de una máquina voladora.
Su construcción comienza con estos chicos en la cadena de comida frita KFC, intentando convencer a un empleado que les proporcione un par de cubetas limpias.
Una vez resuelto este primer paso, el youtuber se dirigió a crear su obra maestra, hecho de una placa de hule espuma, algunos componentes mecánicos y, por supuesto, las cubetas.
Después de varios intentos fallidos, revisiones y reconstrucciones, terminaron con una nave capaz de volar de manera controlada por un mayor lapso de tiempo, y en realidad es algo muy impresionante.
La razón de que diera resultado su experimento se debe a algo llamado ‘efecto Magnus’, que en esencia se trata de que un objeto puede ser aerotransportado por medio de una esfera o cilindro, y si este puede dar los giros suficientes que crean una trayectoria curva de vuelo, basada en la forma en que el aire viaja alrededor del objeto giratorio.
Tal vez esta pueda ser una buena idea para diseños a grande escala en un futuro, aunque probablemente las naves deberían ser más grandes, no lo sé, habría que seguir experimentando…