Según estudios de un equipo de científicos de la universidad de Harvard en Estados Unidos, es mejor tomar cerveza que leche. Esto, con moderación, claro. Los investigadores de la Harvard School of Public Health y la organización PETA, afirman que tomar cerveza tiene muchos efectos positivos.
Tomar cerveza, según 100 casos, fortalece los huesos, previene la diabetes tipo 2 y los cálculos biliares, además de que previene los ataques al corazón y accidentes cerebrovasculares causados por coágulos.
En contraparte, la leche y los productos derivados, tienen efectos negativos para los adultos, como obesidad, diabetes y cáncer. Sumado esto a la aparición de acné, mucosidad excesiva, flatulencias y otras molestias intestinales.
“El alcohol en moderación puede ser beneficioso, mientras que no hay manera de consumir lácteos de forma responsable, ya que tienen un impacto negativo en la salud”, asegura Tracy Reiman, vicepresidenta ejecutiva de PETA (personas en favor del tratamiento ético de los animales).
Así mismo, dio a conocer que el consumo de lácteos contribuye al sufrimiento de los animales. Los becerros son destetados desde que nacen, lo que hace que las vacas busquen a sus crías durante días. Los terneros macho son enjaulados para su engorda. Al parecer, la leche además causa osteoposis más que prevenirla, pues la masa ósea sufre de “agotamiento”, señalan
Otros estudios sobre la cerveza, como el de European Journal of Epidemiology o Journal of Abnormal Psychology, la Asociación Americana Dietética, la Universidad de Tufts en Estados Unidos y la Sociedad Española de Hipertensión-Liga Española, también coinciden en que los beneficios van desde el mejoramiento del sistema cardiaco, nervioso y la composición ósea del cuerpo humano.
Al consumir cerveza, se reduce el riesgo de enfermedades cardiacas hasta un 42% por los polifenoles, que son antioxidantes naturales que previenen las enfermedades cardiovasculares. Este dorado y espumoso líquido reduce el riesgo de desarrollar piedras renales ya que muy por el contrario a lo que se considera de la cerveza, tiene un alto contenido en agua.
Al ser 93% agua, reduce la hipertensión arterial. El silicio que se encuentra en la bebida espumosa ayuda a aumentar la densidad ósea de 3 a 5 veces más que quienes no la consumen. Aunque el exceso tiene el efecto contrario.