El hombre sufre por naturaleza de frente pronunciada y pérdida de muchos jugadores en el equipo. Si el Sol te empieza a dejar huella cuando sales a la calle o no sabes dónde termina la frente y donde empieza la nuca, tal vez sea hora de que empieces a cuidar el cabello antes de que te quedes sin nada.
Las estadísticas muestran que a los 35 años, el 66% de los hombres ya ha perdido gran cantidad de cabello, y que a los 55 años el 85% tienen una calva considerable. Eso significa que tenemos una gran posibilidad de quedarnos sin pelo.
Si sirve de algo, hay evidencia científica de que a las mujeres les enloquecen los calvos, pero también hay otra buena opción: cuidar el cabello preventivamente. Estas son 5 consejos que según la ciencia, pueden ayudarte a prevenir la calvicie:
1. Reduce el estrés
Hay muchos males en el mundo, pero el estrés es considerado uno de los peores en la actualidad. Es mucho más peligroso de lo que crees. Cuando estás estresado tu cuerpo secreta cortisol, la hormona que causa muchas enfermedades como diabetes, síndrome metabólico, tumores, enfermedades del corazón y otras.
Además, conduce a una fatiga de adrenalina que termina por alterar el balance hormonal de tu cuerpo. Eso implica acelerar la pérdida de cabello si es que tienes predisposición genética. Y si no la tienes, también causa pérdida de cabello. Es por eso que debes controlar tu estrés. Una manera efectiva es ejercitarte a diario o practicar meditación.
2. Intenta con minoxidil
Hay muchos productos con minoxidil como ingrediente activo, este ha probado que detiene la pérdida de cabello y probablemente ayude a que te vuelva a salir donde ya no había. Vale la pena intentarlo.
“El Rogaine (que tiene minoxidil) es el estándar óptimo de tratamientos tópicos”, dice el director del centro de investigación cosmética y clínica en el hospital Monte Sinai. Se recomienda utilizarlo en la frente donde el pelo empieza a retroceder y en la parte de arriba de la cabeza. Para mejores resultados, dos veces al día durante seis meses para ver resultados.
3. Propecia
Además de tratamientos no invasivos como el uso de ungüentos tópicos, una opción más agresiva es la prescripción médica de finasteride conocida como Propecia.
Esta reduce la producción de dihidrotestosterona (DHT) en un 60% y aunque el tratamiento no le funciona a todo e mundo, las estadísticas muestran que un tercio de los hombres vuelven a tener algo de cabello nuevo, otro tercio no pierde más y al resto no les sirve para maldita la cosa.
Antes de que corras por un tanque de Propecia, debes saber que es una droga que tiene varios efectos secundarios nada deseables: disfunción eréctil sobre todo. Se sabe que un 15% tienen disfunción y que un 1.5% siguió teniendo el problema hasta 4 años después de haber dejado de tomarla.
4. Shampoo con ketoconazol
Es más fácil que usar cualquier otro shampoo. Generalmente se usa para tratar la dermatitis seborréica y otras enfermedades, pero hay evidencia clínica de que puede funcionar como bloqueador de la caída del cabello. Bloquea la conversión de testosterona en DHT, que es la hormona que reduce los folículos capilares y por lo que pierdes el cabello.
Se puede comprar en cualquier farmacia. Pero recuerda solo usar una cuarta parte dos o tres veces a la semana, o podrías irritarte el cuero cabelludo o resecarlo demasiado, lo que es contraproducente.
5. Toma vitamina D
Un estudio publicado por el British Journal de Dermatología encontró que la vitamina D es muy importante para el cabello. La gente que tiene alopecia areata, que es una enfermedad autoinmune y que pierde el cabello en parches, tenía deficiencia de vitamina D casi en todos los casos, lo que puede ser causa de esta enfermedad.
La dra. Melissa Piliang, experta en pérdida de cabello en la Clínica Cleveland, recomienda tomar 2,000 IU de vitamina 3 a diario. Particularmente en invierno cuando no hay mucho sol. Otro suplemento que vale la pena es el complejo B porque las vitaminas B ayudan. Especialmente la vitamina B7 que hace más grueso el cabello.
6. Come bien
La salud viene de afuera y si no estás alimentando a tu cuerpo con los nutrientes necesarios, no importa que tomes pastillas o te pongas lo que te pongas en la cabeza. Seguirá cayéndose.
La dra. Whitney Bowe, dermatóloga certificada, dice: “una de las primeras formas de saber qué tan sano es alguien y si come bien, es viendo su cabello”. Es importante para engrosar el cabello comer los nutrientes necesarios.
Algunos de los mejores alimentos para el cabello son:
Proteínas provenientes de carnes como cordero y vaca.
Proteína anti-inflamatorias como las del salmón.
Verduras de hoja verde oscura como la espinaca o el brócoli.
Alimentos ricos en minerales como el hígado de res, las nueces y los huevos.
Alimentos ricos en zinc como las ostras, las semillas de calabaza y los garbanzos.
Alimentos anti-oxidantes como las moras y los arándanos.
Alimentos ricos en selenio como las nueces de la india y el atún aleta amarilla.
En cuanto a lo que debes evitar porque estimula la producción de DHT, está:
Grasas trans como los aceites vegetales, aceite de maíz o de soya.
Azúcar.
Alimentos procesados.
Demasiada cafeína.
Alimentos con alto índice glucémico.
Estos son algunos consejos basados en hechos científicos que puedes seguir, pero si de todos modos te quedas calvo, no te apures, recuerda que según la ciencia a las mujeres les atraen los calvos.