A veces nos sorprendemos por los grandes esfuerzos que la gente le mete para conseguir dinero, incluso desperdiciando o arriesgando la propia vida con tal de obtener grandes fortunas. Sin embargo, esto ocurre desde épocas de los emperadores y los faraones, quienes ponían todo su empeño en su lugar de descanso luego de la muerte y pues resulta que en México también tenemos nuestros palacios de ultratumba.
La tiktoker Evelyn (@eve.aristizabal), de Medellín, Colombia, se paseó por lo que dice que pensó que era un barrio de gente pudiente en Culiacán, Sinaloa, sorprendiéndose por la opulencia de las “casas” que allí habían, pero en realidad se trataba de los recontraconocidos Jardines del Humaya, el cementerio más opulento de México.
Turista distraída o influencer temeraria
¿Qué se siente que los muertos tengan una mansión y a ti ni los puntos de Infonavit te alcanzan? pic.twitter.com/Mv9mllVPy8
— tacodealacran (@tacodealacran) October 27, 2022
Según la narrativa de Evelyn, entró al panteón como no queriendo la cosa y empezó a admirarse con el superlujo del que hacen gala, pues es cierto: las tumbas en muchos casos son casas en todo su derecho.
Para cuando se dio cuenta de que no eran casas, sino de mausoleos, la influencer ya estaba embelesada con lo bonito que estaba ese vecindario nice. La chica esperó hasta la noche y pudo ver que la belleza de los edificios era aún más acentuada con la iluminación nocturna, señalando que “se parece a uno de los barrios finos” de su querida Medellín.
Necrópolis de máximo lujo
Ubicado en Culiacán Rosales, el cementerio conocido como Jardines de Humaya se encuentra en calzada Heroico Colegio Militar, en la colonia Miguel de la Madrid. Las construcciones del sitio son, como la influencer señalaba, sumamente ostentosas y opulentas. De hecho, la mayoría de ellas cuentan con seguridad, aire acondicionado, televisión satelital, cuartos múltiples para visitas, etc.
El cementerio empezó en 1969, con la idea de que se convirtiera en el sitio del último descanso de personalidades, figuras públicas y gente prominente de la comunidad. Construcciones de dos e incluso de tres pisos ofrecen a los visitantes de los difuntos todas la comodidades de un departamento, incluyendo, a veces, sala, cocineta, videovigilancia e internet.
Residentes sumamente conocidos
Entre las personas más conocidas enterradas en el lugar se encuentran Arturo Guzmán Loera, Arturo Beltrán Leyva e Inés Calderón. El primero era el hermano de Joaquín “El Chapo” Guzmán; el segundo, uno de los capos más importantes del Cártel de los Beltrán Leyva y el tercero era un conocido narcotraficante durante los años 70 y 80.
El más caro de los mausoleos fue el erigido por el Cártel de Sinaloa para los Guzmán Loera, con valor de un millón doscientos mil dólares, mientras que el segundo más caro es el de Beltrán Leyva, que costó alrededor de 650 mil dólares. Por su parte, la tumba de Inés Calderón tuvo un costo de unos 550 mil dólares, convirtiendo a todas en pequeñas mansiones de lujo.