Conforme la utilizamos más a nuestro favor y en forma positiva, la tecnología se ha convertido en la mejor aliada del cuidado de nuestra salud y, por qué no, en llevar un registro de nuestras emociones.
Una prueba de lo anterior es Koby Soto, un estudiante de Derecho en Tel Aviv, Israel, que utiliza un Fitbit -monitor de ritmo cardiaco y actividad física- y nunca se imaginó que además de llevar el registro de las calorías quemadas, ritmo y pasos, también le serviría para registrar sus sentimientos y su estado civil.
Soto llevaba su Fitbit cuando de pronto recibió una llamada de su entonces novio de hace apenas pocos meses, otro estudiante de Derecho quien era también su compañero.
Soto dijo:
“Él dijo que íbamos a tener que terminar, y yo le dije ‘¿por qué?’, Y él dijo: ‘Las cosas no están funcionando como deberían…’ y yo le dije: ‘¿en serio? ¿Estás haciendo esto por teléfono?'”.
Breakup, as captured by my fitbit. #breakup #Fitbit pic.twitter.com/S9sLV2TlCC
— Koby Soto (@iamkoby) January 19, 2016
El Fitbit de Koby capturó el comportamiento de su ritmo cardiaco durante ese día, incluyendo el momento de la ruptura.
De acuerdo con el dispositivo, su frecuencia cardíaca en reposo promedio durante la mañana de ese día fue de 72 latidos por minuto (cuando todo era calma antes de la noticia), y bruscamente se elevó a 88 latidos por minuto cuando se hizo la llamada, alrededor de la hora del almuerzo.
@DorinManoli actually fitbit thought I was working out. Look at this pic.twitter.com/giwcw762KK
— Koby Soto (@iamkoby) January 19, 2016
Su ritmo cardíaco se mantuvo elevado durante el resto de la tarde, a raíz de la ruptura. Soto se siente reconfortado por los datos que registró sobre una experiencia emocional.
“Siento que es bueno tener un registro de lo que sentí. Se puede decir que mi corazón tiene angustia y se siente mal. La gente se vuelve menos cínica, una vez se les muestran los números, o una vez que le muestras los datos o gráficos. Todo el mundo entiende la angustia, ¿verdad? Todo el mundo lo sintió. Cuando se tiene esto, es interesante, tienes algo que mostrar”.
@matwhi if there weren't 14000 km between us…
— Koby Soto (@iamkoby) January 20, 2016
Este tuit se hizo ido viral, proporcionando un poco de esperanza en medio de la angustia; Soto aún está recibiendo ofertas de personas que desean ver su ritmo cardíaco pero con una razón más feliz.