Cuando viajas en un avión (o en cualquier otro transporte colectivo), algo que siempre llega a incomodar son los niños, pues a diferencia de un adulto que se queda en su asiento durante el viaje, los pequeños tienen un límite de paciencia muy corto, por lo que un viaje largo, el calor o simplemente el aburrimiento los colman y terminan haciendo un berrinche para que sus padres los salven del terrible viaje.
Para el resto de los pasajeros olvidadizos de la naturaleza de los niños, puede ser de lo más fastidioso escuchar el llanto de una bendición, pero en momentos en donde no hay de otra, te sientas y soportas la situación. Son pocos y muy contados los que hacen un pequeño esfuerzo por ponerse en el lugar de los padres y más importante, del infante, para tratar de mediar la situación.
En un vuelo de FlyDubai, que partía de Dubái, en los Emiratos Árabes Unidos, a la ciudad de Tirana, en Albania, los pasajeros se encontraron con que uno de sus compañeros de vuelo era un niño. Algunos se han de imaginar lo que pasó en el vuelo de seis horas. Pero lo más sorprendente fue la reacción de los otros pasajeros, quienes no se molestaron con los llantos.
Los testigos dijeron que al principio, el niño parecía tranquilo, pero después de unas horas, este comenzó a perder la paciencia y comenzó a llorar sin parar. Los padres experimentados sabrán que este es un momento poco oportuno y no existe un botón de mute para silenciar a los pequeños, que fastidiados, son incontenibles.
https://youtu.be/edg1sV4m0Ys
Al principio, los compañeros de vuelo comenzaron a distraerlo, pero ningún niño experimentado en las artes de ser niño cae con esos engaños baratos de adulto y continuó con el desahogo de su frustración. Nada parecía aplacar el incontenible llanto del niño, hasta que todos se pusieron de acuerdo para cantar un famoso himno infantil.
Al ritmo de Baby Shark, los pasajeros del avión comenzaron a entonar los versos de la famosa canción de YouTube, que durante los últimos años ha sido el entretenimiento de los niños y la tortura para algunos padres. Pero como si se tratara de una melodía de Hamelín, el niño, por un momento, desconcertado, puso atención a lo que los adultos estaban cantando. Ya con adultos cantando canciones infantiles, tenemos mucho que decir.
Para bien, la solidaridad de los pasajeros logró un vuelo más ameno para todos, porque los niños también son parte del vuelo y como todos, merecen disfrutarlo. Si este video nos ha dejado una lección, es tener paciencia y que la unión de muchos en un solo propósito puede hacer las situaciones más agradables para todos.
El video de TikTok publicado en la cuenta @parikshitbalochi ya tiene más de siete millones de reproducciones y miles de comentarios que aplauden la acción de los pasajeros, felicitándolos por solidarizarse con el padre y con el niño.