La moda más reciente de las bodas es hacer celebraciones temáticas que se alejan de las “aburridas” ceremonias, pero esta pareja optó por algo muy tradicional que se convirtió en el festejo más épico.
Rune y Elisabeth Dalseth intercambaron sus votos en una auténtica boda vikinga que incluyó vestimenta típica, un sacerdote pagano y hasta un sacrificio de sangre. Así es como se acostumbraba hace más de mil años en Noruega y ellos decidieron revivir esta asombrosa tradición.
La pareja se casó a la orilla de un lago acompañados de 130 invitados. Todos iban vestidos con largas capas y atuendos de cuero. La boda fue dirigida por un Gothi (algo parecido a un sacerdote) quien hizo un ritual conocido como Blot.
En el Blot, se reúne sangre de un cerdo en una pila hecha de piedras; después se sumergen en el rojo líquido figurillas talladas que representan a las antiguas deidades noruegas. Al final, la pareja se acerca y se les coloca una mancha de sangre en la frente, todo acompañado por danzantes y canciones tradicionales.
Elisabeth se emocionó al considerar que en su boda había música y bailes que sus ancestros disfrutaron hace más de mil años.
Ella y Rune se conocieron en el 2016. Ambos provenían de familias cristianas, pero él había decidido convertirse en pagano y le enseñó a su entonces prometida todo el estilo de vida y cultura de los vikingos. Incluso le pusieron a su bebé el nombre de Ragnar Lodbrok, un legendario héroe noruego.
Rune y Elizsabeth ahora son parte de un grupo de má de 6,000 personas en Noruega que están buscando revivir las tradiciones vikingas y cambiar la imagen negativa que el mundo tiene sobre estos peculiares navegantes y sus costumbres.
Él es dueño de su propia carpintería y consiguió dos botes de madera de estilo antiguo para que fueran la decoración de la boda.
Al principio la pareja tuvo dus dudas, pues sus familias cristianas tenían un concepto equivocado de los vikingos a quienes consideraban saqueadores violentos. Pero después de que Rune les explicara cómo sería, aceptaron asistir a la ceremonia y lograron disfrutar de esta original boda. Según él, este “nuevo” estilo de vida les ha sentado muy bien:
Antes de ser vikingo no tenía esposa, casa ni familia; ahora vean lo que he conseguido.
Las bodas de aguacate y otros temas milennials se quedan cortas frente a esta épica ceremonia vikinga.