El trastorno de identidad disociativo (TID) o síndrome de personalidad múltiple es una condición psiquiátrica caracterizada por la presencia de dos o más personalidades en un individuo. Usualmente se presenta como reacción a una situación traumática y se cree que es un mecanismo para lidiar con malos recuerdos.
Leonard Stöckl, residente de Múnich, Alemania, es un joven de 22 años que presenta TID. Su cúmulo de personalidades, que conviven de forma más o menos funcional, es llamada por él mismo “su sistema” e incluye al menos a 10 personas distintas que difieren en voliciones, aptitudes, actitudes, edades, etc. Tal variedad le dificulta salir de casa sin apoyo y le impide desempeñar algún trabajo asalariado convencional.
El primer paso de un largo camino
El joven narra que su condición ha existido desde hace ya mucho tiempo. Durante su adolescencia fue capaz de controlar su condición, pero conforme se enfrentaba a sus exámenes de nivel avanzado (A-Level) el año pasado, los cuales son equivalentes al nivel bachillerato, sus problemas relacionados con la memoria y la concentración le hicieron imposible su vida estudiantil.
A raíz de esos problemas y luego de una estancia de seis semanas en una clínica, se le pudo diagnosticar su particular condición el 26 de abril de 2022. A pesar del alivio de poder darle un nombre preciso a su situación, se dio cuenta de que solo era el primer paso en un camino repleto de esfuerzos para superar las dificultades que se extendían frente a él (ellos).
Leonard, El anfitrión
Leonard se define a sí mismo como “el anfitrión” del sistema, esto es, la personalidad que tiene mayor tiempo en control las acciones de su cuerpo. Le gusta la cocina, vivir con su pareja y debido a que no puede tener un trabajo tradicional estable, vende separadores de libros y bolsos de mano en línea por Etsy. Él es enfático en cuanto a que todos los “sistemas” de las personas con TID son diferentes, pero que comparten un origen en experiencias traumáticas severas durante su juventud temprana.
Sus otras personalidades “alternativas” (o alts) son Kovu (de 4 años), Hektor (de 8), Ana (de 16), Cosmo (de 17), Ash (de 18), Jessy (de 19), Leo (de 21), Billy (de 23), Liv (de 24) y Red (de 26). Las dos mayores, Liv y Red, tienen funciones de protección y cuidado, pues Liv es quien los cuida de abusos sexuales y Red (la “mamá” del sistema de Leonard) se encarga de los baños, las tareas, la limpieza y los asuntos administrativos de su vida (cuentas y papelería, por ejemplo). Por su parte, el más joven, Kovu, es poco conocido por el colectivo (sospechan que está traumatizado) y Ana sufre de anorexia. Mientras que Billy es el que da la cara al mundo y puede ser agresivo.
Su pareja
La relación de Leonard con su pareja, Massimo, se remonta a octubre de 2020. Ambos viven juntos y Leonard dice que “Massimo es la persona que se encarga principalmente de estar al tanto de nosotros”. Además, no debe ser una tarea fácil, pues, según el joven, “cada una de mis (personalidades) alternativas tiene un relación distinta con mi (pareja)”.
Una de mis personalidades lo odiaba al inicio y aunque ahora procura ser amable, no siempre funciona. Como una de mis personalidades es realmente joven, puede resultarle difícil (a Massimo) lidiar con una persona tan (infantil), confrontándolo mientras estamos juntos.
No es fácil, pero tiene sus ventajas
Para el joven alemán, su sistema es una “gran fuente de apoyo” cuando las cosas se tornan difíciles en su relación, pues siempre encuentran la forma de solucionar sus problemas y, al final del día, son como una pareja normal, solo que a veces hay más personas involucradas en esta.
Sobra decir que “el sistema” de Leonard tiene un fuerte impacto en sus relaciones y vuelve a estas más complejas de lo que serían si “no tuviera tanta compañía”. El joven considera que conforme más personas se involucran, y dado que cada persona tiene su muy particular opinión sobre todo, las cosas se pueden enmarañar.
Tratando su condición
Las formas en que la gente con TID puede recibir ayuda incluyen grupos de apoyo en línea y centros de asistencia para la salud mental. Sin embargo, Leonard dice que se debe tener cuidado de la gente en internet y en quién confías. Para ello, existen algunos grupos en Reddit y Facebook donde comparten experiencias y pueden hacer preguntas para recibir la ayuda que necesitan. Incluso asegura que en Alemania hay centros de ayuda contra el trauma, aunque no todo el personal está educado sobre el TID.
Siempre necesito compañía al dejar la casa, pues abundan las condiciones que causan ‘flashbacks’ o ataques no epilépticos. Un perro de servicio podría ser de gran ayuda, pero cuestan unos 32 mil dólares, demasiado caros para alguien que no puede trabajar. Además, quienes tenemos TID necesitamos constante terapia que es difícil de obtener, con listas de espera de meses y a veces de años.
Exposición al público
Leonard empezó a compartir videos en mayo de 2022 con la esperanza de informar al público acerca del TID, proyecto acerca del que se sintió realmente inseguro al principio, cuando acababa de ser diagnosticado, pero en uno de sus videos pudo captar un cambio de personalidad, obteniendo reacciones positivas que lo motivaron a seguir compartiendo contenido acerca del TID.
El TID no es retratado correctamente en series y películas (…) no tenemos superpoderes y no somos peligrosos. Las únicas películas que incluyen TID son fantasía y ‘thrillers’, con los que Hollywood roba nuestra dignidad ante la sociedad. Necesitamos auténticas películas y documentales que ilustren (la condición) y no meras producciones que busquen ganar millones a nuestras costillas y ponernos en riesgo.