Todos llegamos a soñar alguna vez con una historia de amor perfecta y un final feliz con la princesa del cuento. Para Roberto Cazzaniga, un jugador profesional de voleibol italiano, su historia comienza hace 15 años, cuando se enamoró por internet de Maya, una modelo brasileña con la que comenzó una relación a distancia. Por dificultades, nunca se han podido ver. Sin embargo, estuvieron comprometidos e, incluso, Roberto financiaba parte de sus gastos.
Si algo ya les empezó a oler mal, imagínense cómo estaban sus amigos, compañeros de equipo y familiares, quienes veían que sostenía una relación con una persona que nunca había conocido. Maya se veía despampanante en las fotos que compartía y su ajetreada vida de modelo no le permitía pasar tiempo con su novio italiano. Pero para el amor no hay límites ni tiempo, ¿cierto?
Por más de 15 años, Roberto no se percató de que estaba en medio de una estafa. Maya utilizaba fotografías de Alessandra Ambrosio, una actriz y modelo brasileña famosa por ser uno de los ángeles de Victoria’s Secret desde 2004 hasta 2017, en sus redes sociales. La verdad llegó a la luz después de que sus compañeros intervinieron y le mostraron la realidad con una investigación realizada por Ismaele La Vardera, de Le Iene.
Roberto conoció a Maya después que su “amiga” Manuela Passero se la presentó por teléfono y desde entonces sostuvieron contacto. Cuando Ismaele trató de entrevistar en la calle a Manuela, ella dijo que no conocía al deportista, pero aseguró que Maya era su amiga. El equipo de Le Iene no se podía quedar solo con esa información y decidió seguirla para que admitiera la verdad. Entonces se encontraron con el novio de Manuela, quien conducía un Alfa Romeo Mito rosa, el mismo auto que Roberto le había regalado a Maya.
Los amigos de Roberto lo describen como bueno, generoso, introvertido e ingenuo. Pero estaban preocupados porque el deportista estaba sumido en deudas por apoyar a su supuesta novia en diversos tratamientos cardíacos a los que se había sometido. En tan solo cinco meses, le había transferido más de 18 mil euros (más de 20 mil dólares) y tras 15 años de relación, la suma ascendía a más de 700 mil euros (casi 800 mil dólares).
Un día estaba en la habitación, a oscuras. Lo veo llorar, le pregunto qué tiene y me dice que se ha enamorado, pero esta mujer está en cuidados intensivos por una operación de corazón y no puede ir al hospital porque estaría enojada.
—Danilo, hermano de Roberto
Todas las transferencias se habían hecho a la postepay (una tarjeta prepago recargable que no requiere cuenta bancaria) de Valeria Satta. Después de una dura búsqueda en redes sociales, descubrieron que Valeria es una mujer mayor de Cagliari, en Cerdeña, Italia. La abordaron en un centro comercial que frecuentaba y cuando le preguntaron sobre Maya y Alessandra Ambrosio, la señora comenzó a dar evasivas.
La voz de la señora era la misma que la de Maya. Además, su cuenta era a donde se estaba yendo el dinero de Roberto. La mujer estaba acorralada, pero en todo momento quiso mantener la mentira. Al final, tuvo que admitir su fallo a Roberto a través de una llamada. El deportista, con pruebas, dejará el trabajo restante a la Guardia de Finanzas, donde las autoridades procederán conforme a la ley.
Cuando todo fue confesado a Roberto, pareció como si hubiera despertado. Sus familiares y amigos estuvieron cercanos a él. Incluso, celebraron que se hubiera dado cuenta del engaño. Todos realizaron una colecta para apoyar a Roberto con sus deudas. Sin duda, una historia que acabó por la mala, pero con un final feliz: la liberación del deportista de una mentira que lo tuvo sumido por años.
Estoy en esto con todos mis zapatos . ¿Cómo puedo explicártelo? Tengo tantas deudas, no es fácil despertar del coma.
—Roberto Cazzaniga