La fuerza del amor no tiene límites y cuando una pareja se extiende votos de estar en la buenas y en las malas, así como en la salud y en la enfermedad es un compromiso que se lleva hasta las últimas consecuencias. Historias de dedicación a la pareja hay muchas, pero hoy les contaremos la de un hombre que ha estado al lado de su esposa por años, esperando el momento de su recuperación de los consecuencias de un paro cardíaco.
David César y Bruna de Sousa son una pareja brasileña que a diferencia de muchas familias, ha tenido que pasar gran parte de su relación en el hospital. En 2019, ambos se encontraban mirando la televisión en su casa en Maracaná, Brasil, cuando Bruna comenzó a tener un paro cardíaco que terminó en convulsiones. La salud de la mujer cambiaría en este momento, pero no la intensidad del amor de su esposo.
El corazón de Bruna se detuvo por unos minutos y aunque recuperó el pulso, su cerebro no recibió el oxígeno suficiente y sufrió un daño significativo. David supo que en ese momento debía dedicarse por completo al cuidado de su esposo, por lo que permaneció a su lado el mayor tiempo que le fue posible. Sin embargo, su elección de amor le trajo consecuencias en su vida cotidiana.
Debido a sus frecuentes faltas, David perdió su empleo y tuvo que afrontar los gastos médicos de su esposa mientras trataba de sobrellevar el día a día. El amoroso esposo compartió su historia en redes sociales, buscando el apoyo caritativo de las personas y, de esa manera, tener un sustento económico que lo ayudara a solventar lo necesario para el cuidado de Bruna.
David abrió una cuenta de Instagram en donde comparte fotografías de él con su esposa. Además de informar sobre el estado de su mujer, comparte imágenes de los pequeños espacios en donde saca a su esposa a tomar el sol, aunque no está seguro de que Bruna comprenda su entorno, pues la afectación a su sistema nervioso la dejó con incapacidad de realizar movimientos.
La historia de David y Bruna no tardó en volverse viral y encontrar el apoyo de varias personas que donaron a su campaña de crowdfunding, donde lograron reunir dinero para los gastos mensuales, ya que el trabajo como conductor de David era insuficiente. De la misma manera, los neurólogos de Bruna encontraron un medicamento canadiense que la ayudaría a mejorar. Además del medicamento, necesitaría terapia física por tres años para recuperar la movilidad perdida.
Aunque su vida en pareja ya no es la misma, ahora el matrimonio tiene nuevos retos que afrontar junto. Bruna ha encontrado recuperación, aunque no por completo. Pero el amor que ha recibido de su esposo, así como de cientos de personas que se apuntaron para las donaciones a su tratamiento hicieron posible que la mujer pudiera salir adelante y sobrellevar las consecuencias de un accidente que casi acaba con su vida.