Además de usar cubrebocas y gel antibacterial varias veces al día, también sentir “mariposas en el estómago” es una buena medida de prevención contra las enfermedades virales. Es como decía Lennon: el amor es la respuesta, y la ciencia lo confirma.
Ahora que el virus SARS CoV-2 se ha vuelto uno de los más peligrosos alrededor del mundo, las personas buscamos maneras de fortalecer nuestras defensas biológicas, y según el profesor Ignacio Camacho Arroyo de la Facultad de Química en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), estar enamorado es una forma efectiva de reforzar nuestro sistema inmunológico.
El académico explicó a través de una videoconferencia que existen tres etapas durante una relación de pareja: enamoramiento, pasión y compañía; y que es en la primera cuando se presentan los mayores cambios en las respuestas inmunológicas.
Esto sucede porque en esta etapa el cerebro aumenta su actividad y produce sustancias químicas a través de diferentes glándulas para incrementar las defensas biológicas ante agentes patógenos externos. O sea que el cerebro sabe que va a haber mucho intercambio de besos, y se prepara para detener a los virus que seguramente entrarán al cuerpo.
En esta etapa vamos a tener más defensas contra cualquier microorganismo. Si estamos enamorados y nos enfermáramos de COVID-19, por ejemplo, es mucho más probable que podamos resistir al virus.
– Ignacio Camacho
Por supuesto que el enamoramiento no es para siempre, y en promedio dura entre seis y ocho meses; así que esta respuesta inmunológica mejorada también tiene fecha de caducidad.
Es irónico que en un momento en el que estamos evitando el contacto con otras personas sea precisamente el enamoramiento una manera de aumentar nuestras defensas contra los virus. Si todo el que esté enamorado, tendrá mejores oportunidades de evitar los contagios, creo que muchos mejor no nos arriesgamos.