A todos nos ganan los nervios cuando invitamos a salir a una mujer. Tal vez tenemos tiempo conociéndola, en el trabajo, en alguna reunión, algo similar, pero jamás te has atrevido a preguntarle si quiere salir a solas contigo.
El problema es que algunos de nosotros esperamos a que la otra persona haga el primer movimiento, pero tal vez la otra persona tiene la misma mentalidad pasiva que tú, y así nadie saldrá con nadie. Así que, si deseas progresar en tu vida social, depende de ti salir de esa zona de confort y debes invitar a la persona que te gusta a conocerte, y no hay mejor forma que por medio de una salida.
Olvídate de los rechazos, el día de hoy te enseñaremos como h acer invitaciones de manera efectiva y sin incomodidades.
1. Mantén una doble perspectiva
No asumas que la otra persona comparte los mismos intereses que tú, simplemente invítala a hacer algo que consideres divertido. Descubre qué actividades le gustan e invítala a hacer algo que ambos disfruten. De esta manera será más probables que obtengas un sí a la hora de invitarla.
2. Sé específico y directo
Evita las invitaciones confusas e indefinidas, debes ser específico en el día, la fecha y el lugar. Pregúntale si quiere ir a “equis” lugar a hacer “equis” actividad el día “equis” a la hora “equis”. Haz preguntas cuyas respuestas sean sí o no.
Evita preguntas abiertas como: “¿Estarás haciendo algo el sábado por la noche?” Esta pregunta, por lo genera, hace sentir incómoda a la otra persona, pues se sentirá comprometida a aceptar la propuesta o, en caso de que si tengan otro plan, se sentirán mal al decirte que prefieren hacer otra cosa que salir contigo. No des pies a esa incomodidad, mejor planeen juntos la actividad, lugar, fecha y hora juntos de manera directa, sin rodeos.
3. Empieza por algo pequeño
Es más probable que las personas digan sí a una invitación que requiere un compromiso mínimo. Entonces, en lugar de invitarla a una complicada aventura de varias horas, propón reunirte en un café.
De hecho, la propuesta de un café tiene más beneficios de los que te imaginas: si la cita sale mal, puedes cortarla después de media hora. Si va muy bien puedes extenderla y preguntarle si le gustaría hacer otra cosa, como ir a cenar o acompañarte a caminar.
4. Hazlo casual
El tono de tu invitación influirá en la respuesta de la otra persona. Cuando suenas ansioso y desesperado, se entiende como un estado bajo, es decir, envías señales viscerales de que va a ser una carga negativa el salir contigo. En pocas palabras, te percibirás como un intenso.
Mantén las cosas fluidas y, sin que la otra persona lo note, suena despreocupado y tranquilo, siempre con una sonrisa y un tono casual, algo así como:
“Fue genial hablar contigo. Mencionaste que te gusta correr. ¿Quieres que nos veamos el sábado por la mañana para hacer ejercicio juntos?”
No hagas pesada la conversación y siempre con seguridad en tus palabras.
5. Si obtienes un no…
¿Qué sucede si los consejos anteriores no funcionan y la persona aún así declina tu invitación?
Si ella dice que no, pero te propone otro momento, como: “No puedo este sábado, pero ¿qué tal el próximo?” Entonces, probablemente, corresponda a un interés platónico o romántico y quiere conocerte mejor.
Si, por el contrario, dice que no, pero no propone otro momento, significa que probablemente no está interesada en pasar tiempo contigo, y es algo que debemos aprender a aceptar.
Aún así, intenta extender una invitación nuevamente, unos días más tarde. Si la respuesta sigue siendo negativa, no le busques más, te está rechazando.
Claro que, en dado caso de que sigas topando con esa persona, platica con ella e inténtala conocer dentro de un ambiente amigable, tal vez cambie de opinión. Si no, recuerda que hay más peces en el bar y que puedes aplicar estos consejos después con alguien más.