Creo que todos recordamos a nuestro primer amor y así lo haremos por el resto de nuestras vidas, pues no solo se trata de aquella persona que nos dio nuestro primer beso ni es solamente de quien nos enamoramos a primera vista. Nuestro primer amor, sobre todo, nos enseñó a convivir con otra persona, a conocer otra mente y otra vida de manera muy cercana, a experimentar la otredad, aprender de ella y construir momentos duraderos para toda la vida.
Por estas razones, un hombre y una mujer canadienses que habían sido pareja hace 70 años se volvieron a encontrar para cumplir su promesa juvenil de casarse. Florence Harvey y Fred Paul estudiaron en la misma secundaria y fueron el primer amor uno del otro, pero después de dos años de relación se separaron.
Ella fue mi primer amor. Mi primera novia y mi primer amor verdadero.
La causa de su separación fue que Paul tuvo que mudarse a otro poblado para trabajar y cuando volvió a Wandsworth (pueblo de donde ambos son oriundos), Florence también se había mudado, quedando así inevitablemente separados.
Después de este juego de partidas y retornos, cada uno continuó su vida de manera independiente, se casaron y formaron sus propias familias. Pero en 2017, Florence enviudó después de que su esposo Len murió de cáncer y luego en 2019, Paul también perdió a su esposa Helen por complicaciones médicas.
Entonces Florence decidió contactar a Fred para mostrarle sus condolencias y apoyarlo durante un proceso de duelo que ella ya conocía. En el transcurso de la nueva comunicación comenzaron a recordar viejos tiempos, de cuando eran una pareja joven, y las viejas cenizas volvieron a encenderse.
Florence volvió a ver a su antiguo compañero cuando viajó desde Toronto hasta Wandsworth para el cumpleaños de Fred y después de tres días de convivencia decidieron que querían pasar el resto de sus vidas uno junto al otro. Al final, Florence y Fred se casaron el 8 de agosto del 2020.