En ocasiones, el mayor sueño de un niño es tener una mascota. Sin embargo, muchos padres se resisten a la idea de tener que cuidar a un infante y a la mascota a la vez. Cuando Nicole Grimes era niña, siempre quiso un cachorro, por lo que en su cumpleaños número 10, su abuela le regaló una perrita cruza pomerania-caniche a la que nombró Chloe.
Las cosas iban bien entre Chloe y Nicole, pero cuando ella tenía 14 años, su padre consiguió un trabajo desde casa y no podía tener distracciones, ya que recibía llamadas continuas. La perrita era “muy parlanchina”, por lo que la niña ya sabía que en algún momento tendrían que tomar distancia.
De esta manera, la familia tuvo que entregar a la perrita a la Sociedad Humanitaria de Área de Washington. Fue un momento desgarrador, pues este parecía ser el final de la relación entre las amigas, pero, casualmente, humana y perra se encontraron seis años después de una manera especial, que nadie esperaría.
Seis años después, en 2018, cuando Nicole estaba navegando en Facebook, se encontró con un goyo de una perrita que le hizo recordar a su Chloe. Se trataba de una pomerania-caniche, como la suya, que tenía 11 años, como tendría la suya, y se llamaba Chloe, como la suya. Eran demasiadas las coincidencias y aunque era poco probable, ella estaba estaba segura de que se trataba del perro que tuvo que dejar tiempo atrás.
Nicole decidió adoptar a la anciana perrita de 11 años y su esposo creyó que estaba loca. Sin embargo, fueron al veterinario para que escaneara el chip y resultó ser Chloe. Después de tanto tiempo se pudieron volver a reunir. Cuando se vieron, la perrita no dejó de abrazar y lamer la cara de su dueña.
Es un poco más pequeña y no tiene dientes, pero aún así le encanta correr.
—Nicole Grimes
A su encuentro, Nicole ya no era una niña, sino que se había convertido en madre, tenía una hija, Violet, de cuatro meses, con quien su vieja amiga se llevó de maravilla. Nicole dijo a la BBC que Chloe es muy amable con su hija y que le alegra el corazón verlas juntas y espera que la perrita se vuelva la nueva amiga de la infancia de su hija.
De la misma manera, volver a tener a Chloe en sus brazos ayudó a Nicole a afrontar la pérdida de su abuela, quien había muerto tres años atrás. Además, esta historia ha ayudado a muchos dueños de mascotas perdidas a no perder la esperanza de volverse a reunir con su mascota, al igual que lo hizo este perro.