La cachetada de Will Smith a Chris Rock en la entrega de los premios Óscar de 2022 es uno de los acontecimientos más comentados de la industria del espectáculo. Durante semanas se ha hablado de ello, así como de lo que desprendió, pero ha llegado al punto en que podría causar el fin del matrimonio de los Smith o al menos eso dicen los rumores.
Según Ok! Magazine, una fuente no identificada cercana a los Smith habló con Heat World sobre la relación de Will Smith y Jada Pinkett y dijo que entre la pareja “ha habido problemas durante años, pero ahora apenas hablan”. Al parecer, la bofetada no solo hizo a Will perder oportunidades laborales, sino que podría representar una amenaza al matrimonio formado en 1997.
Obviamente, Will no quiere eso, pero no puede soportar tanto.
—Fuente no identificada
Desde hace tiempo, la vida de la familia Smith se ha vuelto tremendamente pública. Por ejemplo, en el programa de Jada Pinkett, Red Table Talk, se ventilaron los secretos de su relación, así como la exposición, a voz de los afectados, de las supuestas infidelidades que hubo dentro del matrimonio y que aún hoy en día sigue siendo tema de debate.
Poco a poco, las tensiones en casa fueron más frecuentes. Aunado a la demandante carrera actoral de Will y la “imagen limpia” que los grandes estudios necesitan para vender sus películas, las constantes revelaciones de la vida privada del matrimonio por parte de Jada pudieran ser la última gota que derramó el vaso. De acuerdo a la fuente anónima, Will estaría “obligado a terminar finalmente las cosas”.
De ser así, el divorcio de la pareja pudiera convertirse en uno de los más caóticos y largos que se ha visto en la industria de Hollywood, aun más que el de Angelina Jolie y Brad Pitt. Un “Sr. y Sra. Smith” de la vida real. Estamos hablando de que solo Will Smith tiene una fortuna de más de 320 millones de dólares, por los que Jada pudiera pelar un porcentaje a derecho, conforme marcan las leyes de California.
Hace unos días, circuló un clip de un programa antiguo de Red Table Talk en donde Jada confesó que realmente no quería casarse. Además, dijo que estaba tan molesta porque tenía que tener una boda que lloró todo el camino hasta el altar. Jada y Will se casaron en 1997 y son padres de dos hijos, Jaden, de 23 años y Willow, de 21.