En la zona fronteriza entre Calexico, California y Mexicali, Baja California se han registrado fuertes vientos que lograron lo impensable (al menos para Donald Trump): derribar paneles del “impenetrable” muro que mandó construir el presidente de Estados Unidos.
Actualmente se realizan trabajos de mejora del muro y resulta que una parte de esas nuevas y reforzadas secciones cayeron del lado mexicano, contenida por algunos árboles.
Carlos Pitones, agente de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos en El Centro, California, manifestó que debido a los fuertes vientos se vinieron abajo algunos paneles metálicos que recientemente habían sido colocados sobre una base de concreto.
Los vientos de hasta 60 km/h lograron derribar una sección debido a que el concreto todavía no secaba totalmente, explicó el funcionario, y además comentó que estaban tranquilos porque no hubo heridos ni daños materiales, solo los árboles que resistieron el peso de esta parte del muro.
Autoridades mexicanas colaboraron para desviar el tráfico de la zona y permitir que empiecen los trabajos de limpieza y de colocación del muro caído, aunque no se sabe cuánto tiempo pueden tardar para que esté listo.
Trump ha hecho lo imposible para tener los recursos necesarios para la construcción de este muro, al que no se ha cansado de catalogar como “impenetrable”, lo que por supuesto ha desatado las burlas de todos, porque no es la primera vez que se ve vulnerado.
Ya sea nadando o con una enorme escalera, varios han demostrado que para nada es invencible este muro. Otros usaron pequeñas herramientas de corte para abrir un espacio y lograr pasar.
Esta es una de las principales promesas de campaña del presidente estadounidense, por lo que el tiempo se le viene encima y constantemente asegura que se trata de una maravilla de la seguridad.
Cualquier muro que se haya levantado sería derribado muy rápido, muy fácilmente. Este muro no es algo que realmente se pueda derribar.
—Donald Trump, en entrevista con la prensa en septiembre de 2019
Ya veremos por cuánto tiempo Trump insiste en que su muro es impenetrable, y también hay que esperar si es que esta “invulnerable” muralla resiste.