Cuando los habitantes de Aberhosan, Gales, comenzaron a quejarse por fallas en el servicio de internet, la compañía revisó e incluso renovó todo el cableado, pero no siquiera así se pudo solucionar el problema. La situación se prolongó durante 18 meses en los que no tuvieron conexión, lo que llevó a un análisis minucioso para descubrir lo que estaba sucediendo.
Resulta que uno de los habitantes encendía su viejo televisor, el cual emite Ruido de Impulso Único de Alto Nivel (SHINE por sus siglas en inglés) lo que afecta todo el espacio radioeléctrico de la zona e interfiere con la banda ancha de todo el pueblo, haciendo muy difícil la conexión a internet. La señal de esta televisión era tan potente que durante un año y medio no permitió que los habitantes de la zona se pudieran conectar.
Obviamente que se desataron reclamos y discusiones con el responsable, aunque él no sabía lo que estaba pensando, y de la vergüenza que ha pasado ni siquiera quiso que se revelara su identidad, pero eso sí, prometió que no volverá a utilizar esa televisión, y es que logró algo que ya quisieran muchos villanos de película o los que se opinen al uso de la tecnología, aunque todo fue sin ser consciente de lo que ocurría.
Prácticamente todos los aparatos emiten este tipo de “ruido”, por eso se recomienda mantener el módem alejado de electrodomésticos, pero lo que llamó la atención es la señal tan potente de este televisor, así que las compañías proveedoras del servicio de internet deberán tener cuidado, de lo contrario alguien puede copiar esta idea para inhibir la conexión en algún lugar, lo que puede ser peligroso.