La pandemia por el Covid-19 ha obligado a muchas personas a quedarse en casa, sobre todo estudiantes, pues muchas escuelas en el mundo optaron por cerrar sus aulas para detener la propagación del virus y han hecho que los maestros adapten sus clases a un formato digital con la ayuda de las nuevas tecnologías.
Desafortunadamente, no todos tienen la suerte de contar con el material tecnológico que esta práctica requiere, pues hay muchos lugares en el mundo, sobre todo en zonas rurales, donde los alumnos no cuentan con computadora, mucho menos con conexión a internet.
Sin embargo hay profesores, como Juan Radovich, que van más allá de sus obligaciones escolares y recorren cielo, mar y tierra con tal de impartir conocimiento a sus alumnos.
Este héroe sin capa se decidió a recorrer un largo camino para ayudar a sus estudiantes. El docente tomó su motocicleta y emprendió un viaje de tres días a través de Misiones, una localidad rural en Argentina, para visitar a cada uno de sus alumnos y proveerles material educativo que les permitiera seguir estudiando a distancia, pues él está consciente de que la mayoría de ellos no cuenta con acceso a internet.
El profesor merece un premio por su vocación, ya que no solo recorrió kilómetros y kilómetros de terreno agreste para cumplir con su deber, sino que lo hizo con recursos propios, pero a Juan parece no importarle pues está contento de poder ayudar a sus alumnos.
Juan dijo a medios locales que, al visitar a sus estudiantes, pudo evidenciar la necesidad que tienen en cuanto a recursos tecnológicos, pues la mayoría no tenía ni computadora y algunos caminaban varios kilómetros para encontrar señal y descargar los materiales necesarios para las lecciones.
Llegar a una casa, preguntar por tu alumna y que te digan que se fue con otros compañeros a un cerro a buscar señal para poder bajar los ejercicios de la escuela, te pinta una realidad que desde el aula no siempre vemos.
—Juan Radovich, profesor
Por el momento, sus 60 alumnos ya no tendrán que preocuparse por conseguir el material de estudio; sin embargo, Juan prevé repetir esta hazaña algunas veces más, pues en Argentina se planea que las clases presenciales se reanuden hasta 2021.
Por fortuna su historia se ha vuelto viral, por lo que esperamos que las autoridades de su país y personas interesadas lo puedan ayudar a llegar a todos sus alumnos para proveerles material.
No sé qué opinen, varones, pero creo que el profesor Juan Radovich se merece un gran aplauso.
