Si de por sí el mundo entero está dividido entre los puritanos de la pizza y los más “experimentales”, ahora el primer ministro de Nueva Zelanda, Bill English, llevó a un nuevo nivel la polémica sobre qué puede y qué no puede ir encima de la pizza, esto luego de que subiera una fotografía con su pizza casera cubierta de… espagueti enlatado.
“Anoche cociné la cena para la familia, ¡da ‘me gusta’ si estás a favor del espagueti enlatado en la pizza!”
Y luego, sin importarle las críticas obtenidas, English agregó:
“He eliminado algo del líquido, pero no del todo, puesto que la pizza es un poco húmeda en el centro. Queda muy bien con piña”.
Este par de comentarios, acompañados de las fotografías, cayeron como una bomba para los puristas de la pizza, quienes no tardaron en criticarlo debido a que su creación era una abominación para la cocina italiana.
Su publicación alcanzó las 10 mil reacciones y al menos 2 mil comentarios, divididos entre las personas que lo apoyan completamente en sus decisiones políticas y culinarias y los que se oponen completamente a la pizza con espagueti o piña; los mismos que piden su destitución como primer ministro de Nueva Zelanda.
La polémica ha llegado a tal punto que los puristas de la pizza están en pláticas con el gobierno italiano para que retire la embajada de Nueva Zelanda de la ciudad de las pizzas, y las decisiones del primer ministro sobre la cocina se verán reflejadas en las próximas elecciones de dicho país, donde Bill English planea reelegirse.
La pregunta es, ¿podremos confiar el futuro de Nueva Zelanda a alguien que le pone espagueti y piña a su pizza? Seguiremos informando.