Por un “error administrativo”, personal del Centro de Reinserción Social (Cereso) para varones de Aguascalientes, en México, liberó a un recluso. El reo había sido ingresado al penal después de una audiencia en la que fue vinculado a proceso por el delito de robo. El juez le había determinado 30 días de prisión preventiva oficiosa como medida cautelar.
Dentro del Cereso, lo destinaron a un área de cuarentena en la que los de nuevo ingreso permanecen durante 15 días para que, después de un perfil realizado por la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, ser asignados al módulo que habitarán durante su periodo punitivo.
Sin embargo, la fuga del prisionero no fue como en la películas hollywoodenses ni como otros grandes escapes de los que les hemos hablado, sino que el hombre salió por la puerta principal y hasta fue acompañado por elementos de seguridad. De acuerdo a las versiones oficiales, se debió a un “error administrativo” en el que se malinterpretaron los documentos.
Las autoridades han dado indicaciones de búsqueda del hombre en fuga. Dentro del penal, la Fiscalía investiga si hubo una complicidad o cuáles fueron los factores que llevaron al presunto error. Los responsables pudieran ser acreedores a sanciones y enfrentar el delito de evasión de presos y ejercicio indebido del servicio público. Se ha abierto una carpeta de investigación, en la que piden a los investigadores actuar con celeridad.
Diferentes versiones comenzaron a surgir al respecto, pues algunos mencionaron que se trató de una fuga asistida y otros que simplemente logró burlar las medidas de seguridad de un sistema ineficiente. Otros indicaron que se trataba de un “pez gordo”, aunque no se ha presentado más información al respecto sobre la fuga y el paradero del convicto.
Juan Carlos Mayoral Esparza y Ulises Adrián García Ponce, director y coordinador jurídico del Cereso Aguascalientes, respectivamente, figuran como los presuntos responsables. Cabe señalar que no es la primera fuga que ha tenido el centro penitenciario, en diciembre, según reporta el Hidrocálido, se dio a la fuga un reo preso por robo de ganado. El penal también ha sido denunciado por sobrepoblación, malos tratos y agresiones contra los internos.
En diciembre de 2021 se reportaba que el 64.9 por ciento de las personas privadas de su libertad vivían en pequeñas celdas hasta con cinco personas, lo que representa violación a sus derechos, un problema sanitario, así como irritabilidad que conduce a constantes conflictos internos. La principal causa son los tardados procedimientos de dictámenes, que llegan a demorar entre seis meses y un año.
