Mientras que los gobiernos trabajan para aprovechar el potencial siniestro de los drones -aviones no tripulados-, para sus operaciones en cubierto y de seguridad, en Holanda están dando un paso más: entrenan águilas para derribar estas naves, pueden ser soluciones más simples y arcaicas, pero ya lo están realizando.
La policía holandesa se unió al equipo de Guards From Above, una firma en La Haya especializada en el entrenamiento de aves de presa para seguridad privada, para ayudar en la protección de los cielos ante los aviones no tripulados y sus misiones.
Con un poco de entrenamiento, las águilas reconocen los aviones no tripulados como presas, que luego desactivan con sus garras y regresan a un lugar seguro. Hasta ahora, es proyecto piloto que siguen aplicando, aunque la policía evalúa si adopta una flota completa de las aves para ir contra los aviones no tripulados, a los cuales revienta como su presa.
Los drones son cada vez más baratos y más accesibles, lo que aumenta el temor de que pudieran ser utilizados por criminales o grupos terroristas. Inclusive, la policía japonesa recientemente anunció que desplegará un batallón de agentes anti-drones y aviones no tripulados incapacitantes.
“En el futuro, los aviones no tripulados se utilizarán cada vez más, así que se incrementará el número de incidentes relacionados con aviones no tripulados. Drones también se pueden utilizar para propósitos criminales”.
– Policía de Holanda
https://www.youtube.com/watch?v=HifO-ebmE1s&feature=youtu.be
La firma de seguridad dice que la técnica que utilizan no es perjudicial para las aves, y no es más peligroso que las presas que se encuentran en la naturaleza. A pesar de ello, la compañía está trabajando con la Organización Holandesa para la Investigación Científica Aplicada (TNO) para evaluar si las hélices de los aviones no tripulados afectan las garras del ave.
En un comunicado de prensa, Guards From Above dijo:
“Nosotros usamos los instintos naturales de caza de las aves con el fin de interceptar aviones no tripulados. Hacemos esto de forma segura, rápida y precisa. El instinto animal de un ave de presa es único. Están hechos para ser capaces de dominar a la presa que se mueve rápidamente. A veces la solución a un problema hipermoderno es más obvia de lo que parece”.
