No cabe duda de que los perros también aprenden de lo que ven a diario, en especial si se encuentran en situación de calle, donde tienen que ingeniárselas para sobrevivir cada día como lo haría un humano en la indigencia. Sin embargo, estamos seguros de que la ocurrencia de este perrito no hubiera sido bien recibida si se tratará de un hombre o una mujer.
Un perrito tailandés se volvió viral al llegar a una tienda con una hoja en el hocico para que se la cambiaran por comida. Al parecer, el perro estaba pagando sus alimentos como lo haría todo ciudadano respetable.
La inteligencia del cachorro enterneció al propietario de la tienda y a cambio le dio una albóndiga, que compartió con otro perro que estaba por ahí. El dueño del local cree que el perrito observó la mecánica del intercambio económico entre él y sus clientes, y aprendió que debía dar algo a cambio para obtener alimento.
El pago canino se dio en la provincia de Ayutthaya, en Tailandia, y el perro se llama Kla. En el video (que puedes ver aquí) se observa cómo Kla lleva en su hocico una hoja otoñal con la que pretende pagar su porción de comida, cómo se acerca con paso seguro hacia la tienda y efectúa su compra.
Kanpicha Leksawan, dueño del restaurante, comenta que Kla se ha vuelto un cliente habitual de su restaurante:
Siempre vemos a Kla venir a la tienda con una hoja en la boca cuando tiene hambre. Simplemente entrega la hoja y se va con la comida que le damos. Tal vez se dio cuenta de que necesitaba darme algo antes de poder conseguir una albóndiga; pero no se dio cuenta de que debería ser dinero y no hojas.
Ahora la gente de la zona le regala billetes de verdad y así Kla puede hacer una transacción real, donde obtiene su comida favorita, albóndigas y chorizo. Pero todos sabemos que el verdadero valor de cambio de un perro se halla en su ternura e inteligencia. Kla no es el primer caso de perritos que aprenden a pagar por sus alimentos, y nos hace recordar a Negro, el perro colombiano que paga por su comida en el Instituto Técnico de Monterrey de Casanare.