Si eres fan de las películas de terror tal vez ya has descubierto lo que un grupo de investigadores de la Universidad de Westminster han notado: el ver este tipo de cine hace que quemes calorías, por lo que vale la pena asustarte un poco, pues a cambio perderás algunos de esos kilos que tienes de más.
De acuerdo a estos investigadores, quienes realizaron una encuesta, además de quemar calorías, el estado de ánimo de quienes ven estos filmes mejora, siempre y cuando se tenga cierto control, ya que si lo que estás viendo te causa pánico, probablemente no podrás controlar tu reacción y eso te generará más ansiedad y angustia que beneficios.
Las personas que logran controlar su ritmo cardiaco durante la película, tienen también control del oxígeno que ingresa a su organismo y de la producción de dióxido de carbono, que es en el caso en que hay beneficio.
Richard Mackenzie, director del estudio, señaló que quienes están expuestos a estas películas, liberan adrenalina, que desencadena una lucha del sistema nervioso por tratar de escapar de ese estímulo que le genera miedo.
Cuando esto sucede, el organismo quema las reservas de grasa para generar energía y poder escapar, además de liberar azúcares a la sangre, y así se aumenta el metabolismo, de tal manera que se pueden quemar los azúcares sin oxígeno. ¿Quién diría que todo esto sucede al ver una película?
Lo anterior, en términos simples significa que quemas calorías y pierdes peso, pero además de eso, de acuerdo a otro estudio, realizado por la Biblioteca Nacional de Medicina de los Institutos Nacionales de la Salud en Estados Unidos, descubrió que al ver películas de terror, el cuerpo libera más glóbulos blancos.
Esto es parte de ese intento de huida ante el estímulo terrorífico, y los glóbulos aumentan de forma temporal el funcionamiento del sistema inmunológico, que nos protege de infecciones.
Además, de acuerdo a Margee Kerr, socióloga y experta en este tema, manifestó en entrevista para Time:
La investigación que mis colegas y yo hemos realizado muestra que los estímulos negativos de alta excitación mejoran significativamente el estado de ánimo.
Al contrario de lo que se pudiera pensar, luego de ver una película de terror, hay una sensación de mayor felicidad, menos ansiedad y menor frustración.
Pero cuidado: los beneficios solo llegan si la persona es consciente de que quiere asustarse. No pretendas jugarle malas pasadas y asustar constantemente a tu esposa para que pierda el sobrepeso que tiene, porque no funciona de esa manera.
La persona debe elegir ver la película, sabiendo que se va a asustar, para mantener el control, de lo contrario, ninguno de los beneficios mencionados surtirá efecto; al contrario.