Cada vez somos más personas habitando la Tierra. El 15 de noviembre de 2022, la Organización de la Naciones Unidas (ONU) celebró, de forma simbólica, que la población global llegó a los ocho mil millones de habitantes, cifra que busca crear reflexión sobre los logros en materia de salud y las carencias por las que millones de persona atraviesan.
El conmemorativo estuvo representado por el nacimiento de Damián, “el habitante ocho mil millones del planeta”, quien vio sus destellos en el hospital de maternidad Nuestra Señora de la Altagracia en Santo Domingo, República Dominicana. El niño llegó en perfecto estado de salud, pesando 2.77 kilogramos y con 52 centímetros de talla.
Sonia Vásquez, la representante nacional del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), asistió al nacimiento de Damián y afirmó que la llegada del bebé representa “mucha esperanza en que todos los niños que nazcan en este planeta (…) los recibamos con condiciones”, en un escenario de salud general en donde se procura que no haya muertes maternas, cero morbilidad y enfermados de salud mental.
En 2011 alcanzamos la cifra de los siete millones de personas en el planeta, un gran logro para los esfuerzos humanitarios en materia de salud pública y otros esfuerzos sociales para el bienestar de las personas en torno a los derechos fundamentales. Si el ritmo de crecimiento demográfico mundial continúa, se estima que para 2085, alcancemos los 10 400 millones de personas en el mundo.
Las cifras generan un gran debate, pues si bien los avances científicos han dejado a una parte de los habitantes globales en un estado privilegiado, de acuerdo a António Guterres, secretario general de la ONU, aún hay millones de personas que pasan por hambre y pobreza. Además, millones de personas se encuentran en desplazamiento por las constantes deudas, problemas económicos, guerras y desastres climáticos.
A mediados de noviembre, la población mundial alcanzará la cifra de ocho mil millones de personas, lo que da testimonio de los avances científicos y las mejoras que se consiguieron en materia de nutrición, salud pública y saneamiento. Sin embargo, a medida que aumenta la familia humana, también se vuelve más dividida.
—António Guterres
Guterres afirmó que si no reducimos el abismo que hay entre las personas que tienen y las que no, estaremos dejando un mundo con ocho mil millones de habitantes “dominado por las tensiones y desconfianza, crisis y conflicto”.
No debemos bajar la guardia, el planeta pasa por grandes cambios climáticos que afectan la vida para los humanos y otras especies. El crecimiento poblacional se da principalmente en los países menos desarrollados, como África Subsahariana. Mientras que la natalidad en países como España o Japón van en descenso.
Nos tomará 15 años llegar a los nueve mil millones de habitantes, pero sin un proyecto, los problemas sociales y ambientales continuarán presentes en la vida de los humanos complicando el pleno desarrollo de los individuos en sus derechos.