Cuando se tienen ganas de salir adelante en la vida, no hay obstáculo que lo pueda impedir, y un pequeño en Mendoza, Argentina nos demostró que siempre debemos luchar por lo que queremos. Además, los dueños de una papelería también nos enseñaron que no todo está perdido en el mundo y realmente es muy fácil cambiarle la vida a alguien que lo necesita.
Un niño que cursa el sexto grado llegó a un local donde venden artículos escolares y pidió que le dieran un lápiz, pues no tenía más dinero para comprar lo que necesitaba y al menos con eso podía hacer sus tareas, lo que sin duda sorprendió al dueño de la tienda llamada Dino, quien no quiso dejar pasar esta oportunidad para apoyar a este jovencito y premiar su actitud, ya que muchos se dan por vencidos ante las carencias y dejan de esforzarse.
Hechos que trascienden. Por casualidad del tiempo presencié esta mañana un hecho que alienta a seguir empujando para el lado correcto. El dueño de la librería DINO (tercera cuadra de libertador) dejó entrar en su local a un niño que no pedía plata ni comida, sino que entró a pedir útiles para ir a la escuela (literales palabras del niño de no más de ocho años), a lo que el señor dueño del local salió proyectado camino a las estanterías y llenó una bolsa al son de la pregunta “qué más necesitas”. Tuve que expresarle mi admiración y recomiendo el lugar, donde seguro habrán pasado más hechos como este, solo que esta vez, yo lo presencié. Me saco el sombrero ante usted don…DINO LIBRERÍA!
-Publicación en Facebook de Pablo Peñaloza, testigo de lo ocurrido
El dueño de la tienda comentó en una entrevista que le ofreció al niño llevarse todo lo que necesitara sin pagar un centavo, así que el pequeño de 11 años se llevó cuadernos, lápices, tijeras, goma y un estuche para guardar sus cosas, lo que parece poco, pero sin duda será de gran ayuda para que siga con sus estudios y logre sus metas. Además, le enseña que siempre hay forma de salir adelante si aceptamos la ayuda de otros.
Este tipo de historias son las que vale la pena no solo dar a conocer, sino replicarlas siempre que tengamos la oportunidad de hacerlo, porque tal vez está en nuestras manos hacer algo por los demás. Con la actual situación económica mundial, probablemente este hombre no ha tenido muchas ventas, pero decidió apostar por el futuro de este niño, quien jamás olvidará lo que hicieron por él. Tú también puedes hacer la diferencia.