A sus cuatro años, Abby Sayles se casó con uno de los enfermeros del Hospital Melodies Center, en Albany, Nueva York.
Pero esta no es una historia de crimen o perversión, sino una historia de verdadera ternura, pues Abby padece leucemia, y uno de sus deseos era casarse con la persona que más la cuida y atiende mientras está en el hospital: Matt Hickling, su enfermero.
La niña fue diagnosticada con leucemia y ha podido cumplir su sueño de casarse con Matt. Las enfermeras fueron sus damas de honor y algunos comerciantes locales donaron las flores y los pétalos de rosa…
Después de los votos nupciales, el enfermero y su paciente se intercambiaron anillos de golosina y repartieron pastel entre los presentes, la mayoría personal del hospital.
“El ser diagnosticado desde los tres años, como ella, es algo muy duro para cualquiera”.
– Matt Hickling
Este tipo de noticias son realmente reconfortantes, sobre todo si tenemos en cuenta lo que Abby tiene que pasar todos los días para mantenerse con vida, y el hecho de que su enfermero ha logrado poner una sonrisa en su cara, restaura aunque sea un poco la fe en la humanidad.
¡Que vivan los novios!