El pasado 10 de enero de 2023, Jeff Beck, uno de los guitarrista más influyentes y con mayor reconocimiento del mundo, murió a los 78 años por un cuadro de meningitis bacteriana, así lo dieron a conocer en un comunicado oficial. El artista británico será recordado como un revolucionario de la música por su audacia con el instrumento, sus composiciones y su calidad interpretativa.
Beck fue un músico que en su desarrollo artístico transgredió las barreras de los géneros, superando los lugares comunes y las convenciones para dar nuevas texturas y discursos al blues, el jazz y el rock, volviéndoselo una inspiración para generaciones de nuevos guitarristas.
Aunque Beck empezó a relacionarse con la música desde niño, el gran salto a la fama lo dio con los Yardbirds, con quien recorrió varios escenarios antes de emprender una carrera en solitario, donde experimentó con otros géneros como funky blues y la ópera. El artista fue considerado uno de los mejores guitarrista del planeta. De hecho, la revista Rolling Stone le dio el quinto lugar en su lista de los “100 mejores guitarristas de todos los tiempos”.
En su trayectoria tocó junto a grandes voces como Luciano Pavarotti, Macy Gray, Chrissie Hynde, Joss Stone, Imelda May, Cyndi Lauper, Wynonna Judd, Buddy Guy y Johnny Depp. Además, fue admirado por los grandes de su época, como Jimmy Page, Jimi Hendrix y Eric Clapton, con quien tuvo una relación tensa, pero con los años fue sacando lo mejor de sí y haciéndolos amigos cercanos y compañeros de gira.
Jeff Beck es el mejor guitarrista del planeta. Está cabeza, manos y pies por encima de todos los demás, con el tipo de talento que solo aparece una vez cada una o dos generaciones.
—Joe Perry para ‘The New York Times‘, 2010
Cuando era niño, Beck construyó su propio instrumento con una caja de cigarros, un marco para fotos y las cuerdas de un avión de juguete controlado por radio. ¿Quién diría que a ese pequeño le abrirían con honores las puertas del Salón de la Fama del Rock en dos ocasiones? En 1992 con los Yardbirds y en solitario en 2009, recordado con su guitarra preferida, una Fender Stratocaster.
Aunque Beck no alcanzó los niveles comerciales que tenían otros de sus contemporáneos, su carrera artística es una de las más influyentes en el rock. Siempre prefirió perfeccionar sus discos y tener un buen recibimiento de la crítica para después retirarse a restaurar autos antiguos, hasta que el llamado de la guitarra se apoderaba de él una vez más.
Me gusta el elemento del caos en la música. Esa sensación es lo mejor que hay, siempre que no haya demasiado. Tiene que estar en equilibrio. Acabo de ver el Cirque du Soleil y me pareció un completo caos organizado (…) si pudiera convertir eso en música, no está muy lejos de lo que sería mi objetivo final, que es deleitar a las personas con el caos y la belleza al mismo tiempo.
—Jeff Beck para ‘Guitar World‘, 2014