Parece que el 2020 será el año de las enfermedades y los contagios. La alerta se enciende de manera inmediata cuando se tienen noticias de nuevos brotes en diversas partes del mundo y ahora es el turno de la India, donde más de 500 personas tuvieron que ser hospitalizadas debido a una enfermedad que todavía no ha sido identificada y tiene en suspenso a los médicos, pues ya se registró un fallecimiento.
De forma repentina e inexplicable, cientos de personas en la ciudad de Eluru comenzaron a convulsionarse, además, se han reportado otros síntomas como ansiedad, náuseas e incluso episodios de pérdida de conciencia, de acuerdo a lo informado por Geetha Prasadini, directora de salud pública, y aunque la mayoría pudo ser controlada y enviada de regreso a su casa, se sabe que al menos una persona falleció por esta enfermedad.
De inmediato se enviaron especialistas de otras ciudades para que investiguen de qué se trata y detener, en la medida de lo posible, la propagación de lo que sea que esté ocasionando el malestar. Al principio se estableció una hipótesis de una probable contaminación de alimentos por pesticidas, sin embargo, llama la atención que entre los enfermos hay personas de todas las edades, no están emparentados e incluso no viven en la misma zona, lo que tiene confundidos a todos, pues no hay un patrón común.
También se dijo que probablemente se trataba del consumo de agua contaminada, pero después de indagar, descubrieron que varios de los afectados no consumían agua de la red municipal y en los estudios realizados no se encontraron bacterias o químicos que pudieran causar el daño, pues los síntomas pueden ser similares a la epilepsia, lo que llevó a la muerte a uno de los pacientes.
A los afectados se les hicieron otras pruebas y resultaron negativos al Covid-19, dengue, chikungunya y herpes, lo que de nueva cuenta deja en la incertidumbre a los médicos, quienes realizan su mayor esfuerzo para identificar a la brevedad esta nueva enfermedad, que pone en alerta a todo el mundo.