En 3 décadas hemos visto horas y horas de diversión, a veces más, a veces menos, de la vida de la familia más popular de las series animadas: Los Simpson, y claro, sabemos que el gusto es muy particular y que es complicado definir cuál de todos sus episodios ha sido el mejor en todo este tiempo.
El 11 de octubre de 1990 se estrenó el que ahora es considerado por la crítica como el mejor de los más de 600 episodios que hemos visto, y fue el primero de la segunda temporada de esta serie. Se le reconoce, más que por gracioso, el sentido simbólico que nos mostró a la sociedad estadounidense a través de Bart Simpson.
¿Ya sabes cuál el capítulo del que hablamos?
Se llama Bart reprueba, y como su título lo indica, el inquieto miembro de la familia está a punto de repetir año si no pasa un examen de historia, por lo que tiene que recurrir al nerd de Martin, con quien hace un trato: él lo ayuda a prepararse para el examen y Bart hará que el cerebrito de la clase sea popular.
Ya había hecho trampa, fingiendo que estaba enfermo para que lo enviaran a casa y así no presentar el examen, y además le pide las respuestas a Milhouse, y así, muy seguro, se presenta al día siguiente a contestar la prueba de historia, pero termina reprobando, pues su mejor amigo tampoco había respondido correctamente.
La sociedad con Martin no prospera y el heredero de Homero Simpson se ve desesperado una noche antes del temido examen, así que solo le queda una opción: rogarle a dios para que ocurra un milagro y así pueda tener más tiempo de prepararse.
Al parecer el ruego fue escuchado, ya que, aunque no es temporada, cae una intensa nevada en Springfield y la escuela está cerrada, con lo que tendría un día más para estudiar, así que se dispone a hacerlo, pero las ganas de jugar y el cansancio terminan por hacerlo que deje de lado los libros, reprobando el examen, pero luego, otro milagro sucede.
https://www.youtube.com/watch?v=dxOinRcUUHg
A decir de los críticos, este capítulo escrito por David M. Stern y dirigido por David Silverman es un ejemplo de lo que realmente significa “el sueño americano”: la lucha del hombre para superar sus dificultades, muchas veces alimentadas por sus propios defectos, y la fe que debe tener en la divinidad para poder resolverlas; esto, claro, si se trabaja para conseguirlo, no solo dejar todo en manos de dios.
Esta parte filosófica y religiosa es lo que ha encantado al menos a los críticos, ya que la opinión de los fans puede ser totalmente diferente, e incluso tal vez ni siquiera incluyan este episodio en sus listas personales de lo mejor de Los Simpson.
Puedes verlo nuevamente, luego de muchos años desde que se transmitió, para ver si tu opinión coincide con la de los críticos.
