Cuando Japón fue elegido para ser la sede de los Juegos Olímpicos 2020, sus habitantes y autoridades estaban muy emocionados y alegres, pero ahora su dicha se ha convertido en duda y ansiedad.
La pandemia por covid-19 causó que se cancelaran toda clase de eventos multitudinarios, desde conciertos de música hasta encuentros deportivos, incluyendo a los Juegos Olímpicos, que iban a tener al mismísimo Gokú como embajador. Estos tuvieron que ser pospuestos hasta el 2021 con la esperanza de que la situación mejorara para entonces.
El gobierno de Japón y el Comité Olímpico Internacional (IOC) ya programaron que el mayor encuentro deportivo iniciará el 23 de julio de este año y durará hasta el 8 de agosto. Por supuesto que esto requerirá un gran trabajo para establecer los protocolos de higiene y seguridad que deben seguir los atletas, entrenadores y otros extranjeros que llegarán a Tokio.
Uno de los voceros del Comité insistió en que lo más adecuado sería que las personas que participen o estén involucradas en las competencias ya estén inmunizadas contra el covid-19, pero que tampoco se les puede exigir tajantemente que estén vacunadas. Confían en que las medidas de higiene sean suficientes. Además, ya no pueden seguir posponiendo este evento internacional.
Ha habido una pequeña extensión de la situación de emergencia (en Japón), pero seguimos planificando Juegos completos. Así tiene que ser, y esa es la única forma en que puede ser para nosotros.
– Mark Adams, vocero del IOC
Sin embargo, la población y los médicos de Tokio no están de acuerdo en que se lleven a cabo los Juegos Olímpicos debido a que el proceso de vacunación en el país no ha avanzado de manera eficiente y no tienen la capacidad hospitalaria para albergar a nuevos contagiados extranjeros.
Actualmente solo se ha vacunado al 3.5 por ciento de la población total de 126 millones de personas en Japón, pues solamente se ha autorizado el uso de emergencia de la vacuna Pfizer.
Los contagios en Japón tampoco se han controlado de forma satisfactoria. De hecho, los nuevos casos desde marzo a la fecha se han incrementado un 528 por ciento, sumando ya un total de 11 500 fallecimientos por covid-19.
En una carta abierta de la Asociación de Médicos de Tokio, que representa a un aproximado de 6000 profesionales de la salud, dirigida al primer ministro Yoshihide Suga, pidieron la cancelación definitiva de los Juegos Olímpicos.
Solicitamos encarecidamente a las autoridades que convenzan al COI (Comité Olímpico Internacional) de que la celebración de los Juegos Olímpicos es difícil y obtengan su decisión de cancelar los Juegos.
El personal de salud de Japón no quiere exponerse a un nuevo incremento de contagios ni tampoco aumentar la ocupación de camas de sus hospitales con atletas extranjeros o sus entrenadores contagiados.
La tensión en Tokio va en aumento conforme la fecha de inicio de este evento internacional se acerca, y no parece que la situación de salud esté mejorando. Hasta ahora el plan de los Juegos Olímpicos sigue en pie.