Luego de encontrar un delfín bebé cerca de la playa de Santa Teresita, en Argentina, a un grupo de visitantes les pareció interesante sacarlo del agua para tomarse fotografías con él, pero no tomaron en cuenta el intenso calor que estaba haciendo, y por supuesto, que se trataba de una especie acuática… en ocasiones la estupidez humana puede alcanzar alturas increíbles…
El delfín bebé murió después de haber sido retirado del mar y exponerlo al sol caliente y a los malos tratos de las personas que querían tomarse selfies con él. La causa de muerte, anunció The Dodo, fue “deshidratación severa y malos tratos”.
Un ecologista de la Fundación Vida Silvestre escribió en internet, en respuesta al incidente:
“[Los delfines] no pueden permanecer mucho tiempo fuera del agua. Tienen la piel muy gruesa y grasosa, lo que proporciona calor, por lo que el clima rápidamente causará deshidratación y la muerte”.
La fundación confirmó que fueron dos los delfines que se retiraron del agua, y señaló que al menos uno de ellos murió, pero no está claro si el segundo sobrevivió.
Como si la pérdida de vidas simplemente para satisfacer la necesidad de los turistas de tener una selfie, no fuera suficientemente mala, los delfines franciscanos -que solo se encuentran en las aguas del sudeste de Sudamérica- se clasifican solo como una “especie vulnerable” por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
La Fundación Vida Silvestre en Argentina ha emitido un aviso público sobre los delfines, de los cuales hay solamente 30 mil en todo el mundo.
Ahora veamos el momento en el que algunos tratan de regresar al agua a este pequeño delfín, pero desafortunadamente ya estaba muerto…
https://www.youtube.com/watch?v=bn9dB_441FA
Las últimas imágenes fueron trágicas: muestran el cuerpo de la cría de delfín, abandonado en la arena.
Su conservación es de particular interés debido a que tienden a nadar cerca de la costa, donde a menudo se enredan en los equipos de pesca… o se encuentran con humanos…