En Apaseo el Grande, Guanajuato, México, se encuentra la maestra Nallely Esparza Flores, quien conmovió a todo el mundo al viajar todos los días en una camioneta a la que le adaptó una mesa pequeña para dar clases personalizadas a sus alumnos que no tienen la posibilidad de acceder a las clases virtuales por sus condiciones económicas tan precarias, lo que la ha convertido en un gran ejemplo y ahora tiene su recompensa.
La maestra Nay, como se le conoce, se ganó el respeto de todos al mostrar que siempre se puede hacer algo más cuando se tiene la vocación y las ganas de ayudar, pues ella no se quedó de brazos cruzados ante la imposibilidad de sus alumnos de recibir educación, ya que carecen de conexión a internet y del dispositivo necesario, así que puso manos a la obra para no dejarlos sin clases.
Este compromiso que también es conmovedor, ha tenido una recompensa, pues como ya se ha vuelto una bonita costumbre, las redes sociales se convierten en un escaparate de las buenas acciones y no falta quienes tengan la posibilidad de premiarlas y alentarlos. La historia de la maestra Nay no fue la excepción y ahora tiene una camioneta nueva.
La noble labor de la maestra llegó hasta la empresa Nissan, quien decidió apoyarla con una camioneta NP300, a la que le adaptaron un bonito salón móvil para que pueda continuar con sus clases de forma más cómoda para ella y sus alumnos. Además, podrá hacer su recorrido de forma más segura en un vehículo totalmente nuevo.
Cuando nos enteramos de la labor de esta maestra, nos reunimos para saber cómo podíamos contribuir a este noble trabajo. Decidimos apoyar en este proyecto y qué mejor manera de hacerlo que otorgando a Nallely una pick-up NP300 adaptada especialmente para ella con un salón de clases móvil.
-Armando Ávila, vicepresidente de manufactura de Nissan México
Estoy sumamente agradecida con Nissan, no me esperaba esta sorpresa. Mis alumnos ya no tendrán que tomar clases en el pleno rayo del sol. Tardaba casi 4 horas al día en recorrer todas las casas para dar seguimiento a los trabajos. La idea nació porque mis alumnos no cuentan con internet en sus casas y la comunicación entre ellos era complicada. Decidí ir casa por casa para darles clases en la caja de mi camioneta con una mesita y sillas.
-Maestra Nay
Ahora tiene el equipo necesario para cuidar los protocolos sanitarios y seguir con la noble labor de educar a quienes no tienen las mismas oportunidades. Además, nos demuestra que cuando hay voluntad, se pueden sumar los esfuerzos para lograr mejores cosas. Aquí vemos el trabajo de la maestra, la solidaridad de la empresa y que cuando usamos correctamente las redes sociales, los resultados son increíbles.