Un hombre en España se autodenomina naturalista, lo que quiere decir que, según él, puede andar desnudo por la ciudad de Valencia en el momento que le plazca y es así, pues la ley lo avala. Por esta razón, este desnudista ha sido citado por las autoridades policiales en varias ocasiones a los tribunales.
Pero en esta última ocasión se pasó de verdura y llegó totalmente como Dios lo trajo al mundo, es decir, encuerado, desnudo de alma y cuerpo, sin vestidura alguna, por lo que causó conmoción. Por supuesto, recibió otra multa por andar perturbando el orden público con el lustro de su piel.
Alejandro Colomar es el nombre de este “exhibicionista” que se presentó a los juzgados sin ropa y que fue reconvenido a vestirse, pues justo cuando ingresaba al edificio había niños que lo podían observar. Tiene 29 años y es ingeniero informático.
Sin embargo, el abogado de Colomar y él mismo argumentan que la desnudez de su cliente no es morbosa, sino que obedece a un ideal de vida. El hombre dice que para ir a restaurantes o al supermercado sí usa ropa, pero que cuando hace deporte, va a la playa o a casa de amigos que comparten su ideología sí que anda desnudo.
Nosotros no creemos que sea obsceno ir por la calle desnudo. Sí masturbarse o hacer actos obscenos. Entendemos que ir desnudo es ejercer la libertad ideológica. Desde que descubrí que era legal hace dos años, siempre voy así porque me siento mejor, por comodidad.
Colomar acumula ya más de veinte denuncias y multas por andar desnudo en las calles. Hasta la fecha ha tenido que pagar cerca de 400 dólares por estar mostrando sus partes pudendas. Pero no todo ha sido represión para él, pues hay quienes han aplaudido su físico y su iniciativa. Pero, quizá, para ser naturalista en la ciudad hacen falta más árboles.